Monumento a la Masonería Universal

En la segunda rotonda de la Avenida Reyes Católicos, el sábado 19 de diciembre de 2015, las Logias del Valle de Salta,

Nombres que enorgullecen a la Masonería Argentina

La Masonería Argentina tiene el orgullo de haber contado en sus filas a hombres que participaron en la construcción de una Nación progresista,

Contribuyendo al Arte de la Ciudad

En adhesión al Bicentenario de la Batalla de Salta, el 20 de febrero de 2.013 la Augusta y Respetable Logia “General Belgrano”...

Simbología en la Arquitectura Sacra

La Masonería se organiza y estructura sobre el gremio de los iniciados en el Arte Real de la Construcción...

Tiempo de Cuaresma

La Orden masónica impulsa el uso de la razón para buscar la Verdad y la Belleza...

martes, 23 de marzo de 2021

24 DE MARZO - DÍA DE LA MEMORIA POR LA VERDAD Y LA JUSTICIA

 

24  DE  MARZO

DÍA DE LA MEMORIA

POR LA VERDAD Y LA JUSTICIA

La fecha está marcada como una de las efemérides argentinas para dedicarla al recuerdo y la reflexión.

El “Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia” es el día en el que se conmemora  a las víctimas de la última dictadura cívico-militar, autodenominada «Proceso de Reorganización Nacional», que usurpó el gobierno el 24 de marzo de 1976, para mantenerse en él hasta el 10 de diciembre de 1983.

No fue ni el primero golpe de estado, ni el primer gobierno de facto en nuestra Argentina, pero sí se caracterizó por establecer un "plan sistemático" de terrorismo de Estado.

Ésta etapa negra de la Historia nacional se inició con el golpe de Estado del 24 de  marzo  de  1976,  ejecutado  por  las  Fuerzas  Armadas  y  sectores  civiles  -principalmente del empresariado y la Iglesia Católica-. El golpe derrocó a todas las autoridades constitucionales, nacionales y provinciales, declarando como sus objetivos el de combatir la "corrupción", la "demagogia" y la "subversión", y ubicar a la Argentina en el "mundo occidental y cristiano".

Es imposible soslayar que el golpe de Estado de 1976 tuvo su contexto en la Guerra Fría entre Estados Unidos y la Unión Soviética. Con fundamento en la Doctrina de la Seguridad Nacional, se pergenio el “Plan Cóndor”.  Se implantó un nuevo modelo económico, centrado en garantizar beneficios crecientes a los sectores más ricos y conservadores. Esta política concibió un plan de acción coordinada y mutuo apoyo entre regímenes dictatoriales en Chile, Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay, Perú, Ecuador, Colombia y Venezuela.

En lo interno, sectores minoritarios pero de poder real insuflaron, a través de los medios de comunicación, la convicción de una situación caótica insostenible, cuando faltaban apenas siete meses para elecciones nacionales.

Estas páginas tristes, dolorosas de la Historia argentina no se limitan a la estimada cifra de 30.000 desaparecidos, y tampoco a las torturas, arrestos ilegales, y apropiación de niños. Se rasgó el tejido social, de tal modo que hasta hoy persisten la negación y el odio hacia el opositor. La economía y la industria nacional fueron boicoteados desde el mismo Estado.

La deuda externa argentina pasó de 7.875 millones de dólares al finalizar 1975, a 45.087 millones de dólares al finalizar 1983 (la deuda de empresas privada fueron “asumidas” por el Estado, aumentando así significativamente la deuda pública). El retraso salarial y la pobreza que eran del 5 % en 1975, alcanzaron el 21 % en 1982. El País quedó en ruina tal que, al asumir en 1983 como Presidente electo por la voluntad popular el Dr. Don Raúl Ricardo Alfonsín, como una de sus primeras medidas, instaura el PAN (Plan Alimentario Nacional), para atender las necesidades básicas de vastos sectores de la sociedad.

En 1985 la Justicia argentina enjuició a los máximos responsables de aquel aciago “Proceso”. Por vez primera en la historia mundial jueces naturales, con fundamento en leyes preexistentes al quiebre institucional, condenaron a los integrantes de las Juntas de Gobierno que usurparon el poder y violaron sistemáticamente derecho fundamentales del Hombre; dejando en la sociedad como impronta el “NUNCA MAS”.

A 45 años de aquel triste 24 de marzo la Masonería, tesonera en la práctica del respeto (la tolerancia), insiste en la necesidad de perseverar en la Democracia. La Libertad y la Igualdad sólo alcanzan el equilibrio esencial para un orden social justo con la convicción y la práctica de la Fraternidad.



miércoles, 27 de enero de 2021

27 de Enero DÍA INTERNACIONAL DE CONMEMORACIÓN DEL HOLOCAUSTO

 27 de Enero

DÍA INTERNACIONAL DE CONMEMORACIÓN DEL HOLOCAUSTO











El 1° de noviembre de 2005 la Asamblea General de las Naciones Unidas establece el 27 de enero como Día Internacional de Conmemoración anual en memoria de las víctimas del Holocausto.


El 27 de enero de 1945 tropas soviéticas liberaron el campo de concentración y exterminio nazi de Auschwitz-Birkenau (Polonia). En 1979  la UNESCO declaró a aquel sitio Patrimonio de la Humanidad , por considerarlo como uno de los lugares de mayor simbolismo del Holocausto o Shoah. Reza una placa conmemorativa:  “Por siempre deja que este lugar sea un llanto de desamparo, una advertencia a la humanidad, donde los nazis asesinaron alrededor de 1 millón y medio de hombres, mujeres y niños, en su mayoría judíos de distintos países de Europa.”. 


La Shoá (La Catástrofe –traducido como Holocausto-), fue el plan de Alemania conocido como “solución final para la cuestión judía”. Resultando imposible conocer con certeza el número de víctimas, se lo estimó y estableció simbólicamente en 6 millones de judíos. Pero la política nazi de exterminio no se limitó  a judíos, sino también a comunistas, homosexuales, masones, gitanos, polacos, prisioneros soviéticos; pudiéndose calcular el número total en 11 millones de hombres, mujeres y niños.


En el Holocausto la Masonería perdió, siempre estimativamente, unos 200 mil Hermanos. Ya en 1934 el régimen nazi declaró a la Masonería enemiga del Tercer Reich, confiscando bienes, bibliotecas, y archivos de la Orden. Los miembros de la Hermandad, como enemigos políticos -entre otros varios colectivos-, eran identificados con un triángulo rojo invertido. En algunos  guetos los masones se identificaban, para reconocerse, con una flor de “nomeolvides” en la solapa.


Desde los albores de su estructuración (1.717),  la Masonería ha alzado las banderas de Libertad, Igualdad y Fraternidad; por lo que la Orden y sus miembros se encuentran siempre entre las víctimas de todo régimen totalitario. En ésta aciaga conmemoración no podemos limitarnos al recuerdo de las víctimas de aquel Holocausto, sino denunciar y repudiar todos los actos de violencia, hambruna, muerte, guerra, migraciones forzosas o forzadas que afligen aún hoy a innumerables pueblos en distintos puntos del Orbe; haciendo votos por que el sentimiento de hermandad nos religue a todos los hombres entre sí y a la Humanidad con la Creación misma.






miércoles, 22 de enero de 2020

Tarja Potosina


TARJA   POTOSINA
Exquisita joya en plata y oro obsequiada al General Belgrano por las damas potosinas

La Villa Imperial de Potosí, hoy Potosí, se extiende a las faldas de una legendaria montaña llamada Cerro Rico (en quechua: ‘Sumaj Orcko’), en la cual se situó la mina de plata más grande del mundo desde mediados del siglo XVI hasta mediados del siglo XVII. Los españoles que vivían en la ciudad disfrutaban de un lujo increíble. A comienzos del siglo XVII Potosí ya contaba con treinta y seis iglesias espléndidamente ornamentadas, otras tantas casas de juego y catorce escuelas de baile. Había salones de bailes, teatros y tablados para las fiestas que lucían riquísimos tapices, cortinajes, blasones y obras de orfebrería. De los balcones de las casas colgaban damascos coloridos y lamas de oro y plata. 
Las tarjas potosinas eran adornos opulentos que con total normalidad formaban parte de las casonas, adornando los salones, habitaciones y zaguanes. Eran planchas metálicas o telas de plata y oro. Se usaban especialmente en las fiestas privadas, y también eran expuestas fuera de las casonas cuando se realizaban las principales fiestas de la Ciudad, colgándolas de magníficos arcos de plata, o desde los balcones o ventanales de toda la Villa. En algunas ocasiones también eran fundidas como obsequios a autoridades, vencedores de corridas de toros o como trofeos.

El 4 de julio de 1813, las damas de la Villa Imperial de Potosí obsequian al General Manuel Belgrano una tarja en reconocimiento y homenaje a los Triunfos de Tucumán y Salta.
Elaborada en plata y oro, mide 1,70 mts. de alto por 1,03 mts. de ancho, es una joya de estilo barroco en la que se yuxtaponen frutas, flores, animales y figuras humanas. En la parte central campea como idea-madre, una hermosa placa de oro en forma de escudo oval. En ella se lee: "Las potosinas constantes. Que fieles se han mantenido. En defender el partido. De vuestras armas triunfantes. Viendo cuan interesantes. Son tus triunfos y victorias. Desean que a nuevas glorias. ¡Oh Belgrano! Te prevengas. Por la Patria y te mantengas. De su amor, estas memorias".
Fue realizada en plata y oro macizos extraídos del Cerro Rico de Potosí. Dicha mina se encuentra representada sobre el óvalo central de oro. La obra incluye un mapa de América central y del Sur, a los océanos Atlántico y Pacífico representados por dos barcos de oro, y referencias a la historia regional. En la parte superior, la obra está coronada por la figura de un rey Inca. De esta forma, la pieza simboliza el proyecto americanista que Belgrano consideraría para definir la forma de gobierno de las Provincias Unidas del Sur: una monarquía Inca. La pieza es sumamente compleja en su composición y representa también la fauna y la flora de la región.
Belgrano donó esta importante pieza de arte al Cabildo de Buenos Aires y con el tiempo pasó al Museo Histórico Nacional.




Las damas patricias de Potosí ofrendan la tarja de plata a Belgrano . Óleo sobre tela.
Autor: Rafael del Villar

Crónica Belgraniana


 CRÓNICA  BELGRANIANA    

15  DE  JULIO DE  1730    Nace en Oneglia -región de Liguria, al noroeste de Italia-, Doménico Francesco Belgrano y Peri (1730-1795), Domingo Francisco Belgrano Pérez en su versión castellanizada; hijo de padres italianos: Don Carlos Féliz Belgrano Berio y de Doña María Gentile Peri Tiragalo (padre, abuelo y abuela paternos de Manuel Belgrano, respectivamente). 
23 DE OCTUBRE DE 1742     Nace en Buenos Aires María Josefa González Casero (1742-1799), hija del santiagueño Don Juan Manuel González de Islas, y la porteña Doña María Inés Caseros Ramírez (madre, abuelo y abuela maternos de Manuel Belgrano, respectivamente).

3  DE ENERO DE  1750     Don Doménico Francesco Belgrano y Peri es enviado por su padre a Madrid, para que emprendiera una carrera mercantil independiente -aunque estrechamente asociada con la propia-. Los contactos -en razón de ese vínculo familiar-, con la administración regia y el alto comercio de la capital española le permitieron consolidar rápidamente una posición en ese más amplio escenario.

29  DE  SETIEMBRE DE  1754     Don Doménico Francesco Belgrano y Peri ingresa a la Venerable Orden Tercera de Santo Domingo, en la que llegó a ejercer el alto cargo de Prior. Asimismo, entró en la Cofradía del Rosario, y en ella desempeñó más tarde los oficios de Revisor de cuentas y de Mayordomo.
  
15  DICIEMBRE  DE  1755     La economía europea había desbordado los límites del mundo mediterráneo. Evaluándolo oportuno, el padre envía a Don Doménico Francesco Belgrano y Peri a Buenos Aires. Desde el momento mismo de su llegada pudo continuar avanzando en la carrera mercantil, desde una posición ventajosa comenzada en la Península.

4  DE NOVIEMBRE DE 1757     Doménico Francesco Belgrano Peri, alias Bicho Colorado -es más por su mal talante, que por su pelo rojizo, que lo llaman así-, futuro padre de Manuel Belgrano, de 27 años, contrae matrimonio con la joven porteña llamada María Josefa González Casero, de 15 años, “integrante de un linaje de antiguo arraigo, en la futura metrópolis del Plata, pero bastante alejado de la opulencia. El abultado patrimonio que adquirió Don Domingo, le permitió a la familia una destacada posición económica". El propio Manuel Belgrano lo cuenta en su “Autobiografía”. El matrimonio tuvo en total 16 hijos, de los cuales 11 -8 varones y 3 mujeres- vivían aún en 1795, año en que fallece Don Domingo. Vivieron en calle Santo Domingo (actual Av. Belgrano 430, donde hoy existe un edificio con un cuadro del prócer y una placa recordatoria).

15 DE DICIEMBRE DE 1766     Don Doménico Francesco Belgrano y Peri (Domingo Francisco Belgrano Pérez en su versión hispanizada) con 36 años, y desde hace 16 años radicado en Buenos Aires, tiene su primer año comercial importante del trieño 1764-1766, realizando operaciones por 47.896 pesos. A fines del siglo XVIII, Domingo F. Belgrano era uno de los hombres más rico de Buenos Aires, y posiblemente del Virreinato del Río de la Plata. Al morir su fortuna era la segunda más importante de la ciudad. Su patrimonio neto al morir en 1795 llegaba a 370.686 pesos y 5 5/8 reales, “un modesto comerciante que llegó a convertirse luego de 40 años de actividad en un gran personaje de fines del período colonial”.

15 DE  JUNIO DE 1767     Don Doménico, futuro padre de nuestro prócersolicita su carta de naturalización, y en 1769 reitero tal pedido.
  

10 DE SEPTIEMBRE DE 1769   Don Doménico Francesco Belgrano y Peri mantenía vinculaciones con importantes funcionarios de la Península, y en la fecha obtuvo carta de naturalización convirtiéndose en súbdito español de pleno derecho. Su nombre  fue castellanizado como Domingo Francisco Belgrano Pérez.

3  DE   JUNIO DE  1770     Nació Manuel José Joaquín del Sagrado Corazón de Jesús Belgrano, cuarto hijo varón de Don Domingo Francisco María Cayetano Belgrano Peri, originario de Oneglia, Génova, y Doña María Josefa González Casero, criolla de estirpe, casados en Buenos Aires el 4 de noviembre de 1757. Recibió sus primeras enseñanzas, como era la costumbre, de su madre; y se supone, por la vecindad, que a los 7 u 8 años concurriera a la Escuela de Dios del Convento de San Pedro Telmo, próximo a la actual Basílica del Santo Rosario de la Orden de los Predicadores de Santo Domingo de Guzmán, a escasos metros de su hogar natal -actualmente en la avenida que lleva su nombre al 430- a cuya Orden Terciaria pertenecían sus padres; en ella, los maestros de primeras letras eran, en ese tiempo, fray José Pelliza y el hermano José Zemborain.

4  DE  JUNIO DE  1770     En el libro parroquial de bautismos de la Iglesia Catedral de Buenos Aires  -registros iniciados en el año de 1769 y concluido en 1775-, se lee al final de la página 43 los siguiente: "En 4 de junio de 1770, el señor doctor don Juan Baltasar Maciel canónigo magistral de esa santa iglesia Catedral, provisor y vicario general de este obispado, y abogado de las reales audiencias del Perú y Chile, bautizó, puso óleo y crisma a Manuel José Joaquín del Corazón de Jesús, que nació ayer 3 del corriente: es hijo legítimo de don Domingo Belgrano Pérez y de doña Josefa González: fue padrino D. Julián Gregorio de Espinosa". 

12 DE OCTUBRE DE 1772       El gobernador Vértiz nombró capitán a Don Doménico Francesco Peri, en atención a su mérito, celo y conducta.
                                 
7 DE ABRIL DE 1778     Don Domingo Belgrano, padre de nuestro prócer, se integró rápidamente a esa elite mercantil que formaba el sector más rico y de mayor figuración en Buenos Aires, donde controlaban el Cabildo y tenían trato cotidiano con las autoridades coloniales, con las que hacían negocios legales e  ilegales indistintamente. En la fecha Don José de Gálvez -impulsor de la creación del Virreinato del Rio de la Platas- participaba al Virrey Vertiz  y al Intendente Manuel Fernández que “había resuelto se erigiera en el puerto de Buenos Aires una Aduana”. En 1778 Junto con la autorización del Puerto, se estableció la Real Aduana de Buenos Aires. Así, Don Domingo Belgrano Pérez, sin dejar sus actividades comerciales particulares, se desempeñó como vista y contador de la repartición.

5 DE MAYO DE 1778     Don Doménico Francesco Peri -padre de Manuel Belgrano- , ingresó en la administración de la Aduana de Buenos Aires.
                       
5 DE MARZO DE 1781     Don Domingo Belgrano Pérez se lanza al comercio de esclavos. Así, con 20 mil pesos, Belgrano Pérez compra y envía desde Brasil hasta Montevideo 213 esclavos, de los cuales llegan a la última ciudad solo 183, que vende en algo más de 28.000 ps. 

 3 DE JUNIO DE 1781         Don Doménico Francesco Peri -padre de Manuel Belgrano-, fue designado regidor, alférez real y síndico procurador general del Cabildo de Buenos Aires. 
                                    
5 DE MARZO DE 1783     Manuel Belgano -adolescente de 13 años-, inicia sus estudios secundarios en el Real Convictorio Carolino o Real Colegio de San Carlos, donde cursa lógica y metafísica en primer año, latín y física en segundo, ética y moral en tercero; bajo la dirección del doctor en teología Don Luis Chorroarín.

5 DE FEBRERO DE 1785     Don Domingo Belgrano Pérez compró, a partir de 1764, 20 propiedades urbanas. En la fecha adquiere la más grande de estas casas por 12.000 ps., que a los pocos meses alquila a los Hermanos De La Peña Fernández en 900 ps. al año.


6 DE MAYO DE 1786     Promedia los diecisiete años cuando Domingo José Estanislao Belgrano (Licenciado en Teología), escribe desde el Monserrat de Córdoba a su padre Don Domingo, acerca de los problemas suscitados por el desempeño de su hermano Francisco, como estudiante en el Colegio porteño de San Carlos: “He sabido por varias partes que mi hermano menor Francisco ha tenido y tiene continuamente pleito con sus superiores y mucho más que está totalmente disgustado con ese Colegio. Todo lo he creído porque ha imitado a sus buenos hermanos que mayores ejemplos le hemos dado. Al caso estando así no me parece conveniente que aún lo mantenga Usted dentro gastando más y aprovechando menos, que todo esto se sigue dentro de lo primero; con que si yo tengo algún valimiento encargo a Usted que supuesto ha de marchar con Manuel [a la Península] lo tenga Usted en casa de donde podrá continuar, y no será el primer hermano que supo gramática sin estar en San Carlos”.
  
 13  DE  JUNIO  DE  1785     Contraen enlace en la Catedral de Bs. As. (fundada el 11 de junio de 1580), la hermana del prócer, María Josefa Anastacia Belgrano González y José María Calderón de la Barca Vera (tuvieron 11 hijos: 8 varones y 3 mujeres), el oficio religioso estuvo a cargo de Monseñor León Federico Aneiros -Obispo auxiliar, serán los tutores de Manuel en España.  

18 DE MAYO DE 1786     En el Real Colegio de San Carlos se graduó Manuel Belgrano, con diploma de Licenciado en Filosofía; documento obrante en la Universidad de Salamanca, España, junto con su solicitud para cursar la carrera de comercio, según los deseos e intereses paternos, aunque posteriormente se orientó por su vocación a la de Leyes, como se denominaba a la de Abogacía, o “En ambos Derechos, español y canónico”, más acorde con sus preferencias e inclinaciones.

16  DE   JUNIO DE 1786     Su padre obtiene autorización gubernativa, para que sus hijos Francisco y Manuel se trasladen a España para realizar sus estudios universitarios. Llegaron al Puerto de La Corruña –Galicia-, el 15 de octubre de 1786. Sus tutores en la Madre Patria fueron su hermana María Josefa Atanasia Belgrano y su esposo José Calderón de la Barca, en excelente posición económica y social. Manuel Belgrano, optará posteriormente por un pensionado cercano a la Universidad para gozar de mayor libertad personal.

27 DE JUNIO DE 1786     El Dr. Cayetano Fernández Agüero, cura rector de la Catedral de Bs. As., certifica la fe de bautismo de Manuel Belgrano a pedido de su padre, Don Doménico Belgrano Peri; quien la ha solicitado a fin de contar con una copia certificada para efectuar las tramitaciones reglamentarias de su hijo. 

20 DE NOVIEMBRE DE 1786     En octubre, con 16 años de edad, Manuel Belgrano desembarca con su hermano Francisco José María en La Coruña (Galicia, España), y rápidamente partió a Salamanca. En donde este día (20-11-1786), se presenta en la Universidad para inscribirse. En España existían ya 16 universidades y la de Salamanca era la más prestigiosa. Belgrano acreditó tres años de estudios en el Real Colegio de San Carlos -firmado por el Dr. Maciel -cancelario del Colegio-, pero el certificado que llevaba consigo no especificaba las materias que había cursado –el documento hacía constar que “Manuel Belgrano Pérez cumplió el trienio público de Filosofía, presentó los trabajos exigidos por las Constituciones, sufrió (aprobó) los exámenes particulares y obtuvo los sufragios de todos los examinadores”-, por lo que no se lo reconocieron. Para sortear la dificultad, tuvo que comenzar a cursar como oyente y rendir examen de Filosofía Moral. Al mismo tiempo solicitó a Buenos Aires un nuevo certificado, que luego no le hizo falta.

8  DE  JUNIO  1787     La Cancillería del Colegio de San Carlos (actual Colegio Nacional de Buenos Aires) le expide a Manuel Belgrano su título de Licenciado en Filosofía.
  
12  DE  JUNIO  DE  1787     Mediante la acreditación de tres importantes escribanos públicos, se certifican las firmas y el documento que acredita a Manuel Belgrano como Licenciado en Filosofía.  

18  DE  JUNIO DE 1787     Manuel Belgrano pudo rendir examen ante los catedráticos Gabriel de la Peña y Antonio Reirraud, logrando regularizar su situación, y matriculándose en Leyes en la Universidad de Salamanca. En un documento fechado ese día consta la inscripción de “Don Manuel Belgrano Pérez, natural de la ciudad de Buenos Ayres, reino del Perú”. 

7   DE   SEPTIEMBRE  DE   1787     Manuel Belgrano se había anotado en Leyes y este día aprueba el primer año con los mismos profesores, Peña y Reirraud.

21  DE  JUNIO DE  1788     Con la firma del Secretario General de la Universidad de Oviedo, Don Francisco Xavier Mere, se le extiende a Manuel Belgrano el certificado de los seis cursos completos aprobados en dicha Universidad.

22 DE JUNIO DE 1788     Los escribanos de número de la misma Ciudad de Oviedo legalizan la certificación.

15 DE DICIEMBRE DE 1788     Por una misiva enviada por su madre, Manuel Belgrano se entera que su padre había sido sometido a proceso y encarcelado, y que se le habían confiscados todos su bienes, sospechado de estar vinculado a la quiebra de su íntimo amigo y administrador de la Aduana. “…El asombroso descubrimiento de más de 200 mil pesos en que se hallaba contra la Real Hacienda”, para justificarse el administrador -F. X. de Mesa-, “alegó tener pendientes cuatro remesas de cuero que había hecho por mano de Don Domingo Belgrano, y siendo este íntimo amigo del administrador se le creyó cómplice en la quiebra”.   Frente a tal situación, Doña María Josefa González debió hacerse cargo de la difícil tarea de rehabilitar a su esposo, sostener a la familia en Buenos Aires y atender a la vida de los hijos que se hallaban en España.  Don Domingo Belgrano Peri había cumplido con general beneplácito sus funciones en la Aduana, poniendo orden en los libros y promoviendo operaciones comerciales que incrementaron el Real Tesoro, sufrió las consecuencias de su íntima amistad con el administrador de aquel Organismo, Francisco Ximénez de Mesa, sometido a proceso por orden del tercer virrey del Río de la Plata, Nicolás del Campo, Marquéz de Loreto. Manuel Belgrano realiza gestiones ante la Corte en España, que recién en 1794 logrará la restitución de sus bienes y derechos. 

27 DE ENERO DE 1789     Manuel Belgrano, con 19 años, prestó juramento de obediencia en la Universidad de Valladolid,  solicitando que se lo autorizase para rendir examen de Bachiller en Leyes, exponiendo sobre el tema “Quibus Modis Reconstritur” con todo éxito.

28 DE ENERO DE 1789     Según un documento hallado en 1949 en el legajo de Manuel Belgrano, el 23 de enero había presentado en la Universidad de Valladolid tres documentos solicitando que se le reconozcan estudios hechos en la Universidad de Oviedo, y pide fecha de examen de Bachiller en Leyes, lo que le fue concedida en la fecha destacada, y con cuya aprobación obtuvo el título con medalla de oro -ese año cumpliría los 19 años de edad-. Al pie, aparece un certificado del 21 de junio de 1788 en el que se afirmaba, ¡nada menos! que se había matriculado en 1782 y había “cursado, con asistencia por mañana y tarde dos años de Filosofía y cuatro de Instituciones Civiles en la Universidad de Oviedo” -suceso este imposible, ya que Manuel Belgrano llegó a España en 1786-. Entonces, queda confirmado que Belgrano se forma en Salamanca, pero se gradúa en Valladolid, y pudo inscribirse allí con un certificado “falsificado” de la Universidad de Oviedo. Sin duda, se trató de un papel donde se fraguaban los datos para favorecer que, mediante un rápido examen, Belgrano pudiera terminar su carrera. No es posible indagar más a fondo el origen de la constancia aludida porque los archivos ovetenses fueron destruidos por bombardeos durante la Guerra Civil Española de 1936-1939.

31 DE ENERO DE 1789   Manuel Belgrano se gradúa como Bachiller en Leyes (abogado) en la Universidad de Valladolid.  
                                            
7 DE FEBRERO DE 1789     Manuel Belgrano recibía el certificado de Bachiller en Leyes, salía de la invernal Valladolid y regresaba a Madrid para instalarse en casa de su hermana María Josefa Anastacia Belgrano Gonzalez (1767-FD), casada con José María Calderón de la Barca Vera (1757-1825). A esa fecha le quedaban por cumplir tres importantes cometidos: trabajar por la dilucidación del caso de su padre y demostrar su inocencia, realizar la correspondiente pasantía forense con el objeto de obtener su habilitación para ejercer la abogacía, y lograr un puesto lucrativo dentro de la administración española. 

17 DE JUNIO DE 1789     A los 19 años, recién cumplidos, Manuel Belgrano es elegido Presidente de la Asociación de Derecho Romano, Práctica Forense y Economía Política de la Universidad de Salamanca, extraordinaria distinción por ser tan joven y ser indiano.
                                                
11 DE JULIO DE 1790     El Papa Pío VI le concede a Manuel Belgrano "... la facultad de leer y conservar durante su vida y todos y cualquier libros de autores condenados aunque fuesen heréticos, y en cualquier forma que estuvieren prohibidos... ".

8 DE DICIEMBRE DE 1790     Resultan interesantes las cartas que Manuel Belgrano envía desde España a sus padres, pues revelan la formación austera y la responsabilidad que había adquirido en el seno del hogar, como así también su profundo sentimiento religioso. Respetaba y al mismo tiempo amaba a sus padres, tratando de no molestarles ni disgustarles. En carta a su padre de la fecha, le dice: La Borla de Doctor esto es un patarata por tener yo que emplear propiamente en cosas inútiles, el tiempo en el Foro. Ya que de nada sirve [...]”. Trataba de no gastar dinero, salvo en la compra de libros de filosofía y de temas económicos. Aprovechaba el tiempo y la posibilidad de encontrarse en Europa para viajar a Francia e Italia, pues entendía que era importante para adquirir cultura y enriquecer sus conocimientos.

31 DE ENERO DE 1793     La Real Cancillería de la Universidad de Valladolid le concede “licencia y facultad para que use y ejerza el empleo de Abogado”, recibiendo el título profesional el 6 de febrero, radicándose en Madrid.

7  DE  MAYO  DE  1794     El Dr. Manuel Belgrano llega a Buenos Aires, dispuesto a consagrarse a sus obligaciones y poder aplicar sus vastos conocimientos teóricos para comprender la realidad y tender a su transformación. El Consulado celebra su primera sesión el 2 de junio de ese año, tiene jurisdicción mercantil, a la par que carácter de junta económica para el fomento de la agricultura, industria y comercio. Entre las atribuciones del Secretario figura la de ‘’escribir cada año una memoria sobre los objetos propios de su instituto”. Belgrano despliega entonces una actividad incansable. El Consulado tenía jurisdicción sobre todo el Virreinato del Río de la Plata, y Belgrano mantuvo una fluida correspondencia con los diputados en los distintos destinos, pidiéndoles que le mandaran información detallada de las características geográficas y de las producciones locales. Se ocupa de tratar de reformar los abusos del comercio exterior y fomentar el interno reduciendo las exacciones que gravaban el mismo, facilitando la navegación fluvial e insistiendo en la construcción de nuevos caminos como los de Catamarca y Córdoba, Tucumán y Santiago del Estero, San Luis y Mendoza, e incluso busca franquear las comunicaciones entre Buenos Aires y Chile. Se auxilia de estudiosos y organiza viajes de reconocimiento del territorio, levantando planos topográficos, e interesándose en los indígenas establecidos fuera de la frontera con el español, a los cuales busca integrar a través del comercio y evangelizar para su desarrollo como personas. En Belgrano es constante su interés por un mejoramiento económico, sin descuidar los aspectos sociales y morales de la población. El Consulado bajo su inspiración, se aboca a la construcción del muelle de Buenos Aires, iniciando las obras que implican el sondeo del río y reconocimiento de la costa.

2  DE JUNIO DE  1794     Celebra su primera sesión el Real Consulado de Buenos Aires, del que Manuel Belgrano -de 24 años de edad, es Secretario Perpetuo, función que ejerció hasta poco antes de la revolución de Mayo. Estando en España, en diciembre de 1793, fue llamado por el Ministro Gardoqui, quien le anunció que ha sido nombrado Secretario Perpetuo del Consulado que se ha de erigir en Buenos Aires.   Manuel Belgrano, como secretario del Real Consulado   Aires, tuvo como objeto fundamental el atender a tres pilares básicos: fomentar la agricultura-ganadería, animar la industria y proteger al comercio en el orden interno y externo del nuevo Virreinato del Río de la Plata. Consideraba a estos tres rubros las fuentes principales de la riqueza y felicidad de los pueblos. En Europa su maestro Campomanes le había enseñado que la auténtica riqueza de los pueblos se hallaba en su inteligencia, y que el verdadero fomento de la industria se encontraba en la educación. Con Juan José Castelli, primo de Manuel Belgrano, compartieron las labores en el Consulado de Buenos Aires y en el periodismo. Durante su gestión estuvo casi en permanente conflicto con los vocales del Consulado, todos ellos grandes comerciantes con intereses en el comercio monopólico con Cádiz. Año tras año presentó informes con propuestas influenciadas por el librecambismo que, en general, fueron rechazadas por los vocales. Belgrano sostenía por entonces que "El comerciante debe tener libertad para comprar donde más le acomode, y es natural que lo haga donde se le proporcione el género más barato para poder reportar más utilidad".

24 DE SEPTIEMBRE DE 1795   Fallece en la Ciudad de Buenos Aires Don Doménico Francesco Belgrano Peri (Domingo Francisco Belgrano Pérez), padre del Gral. Manuel Belgrano. En su testamento pidió ser sepultado en la Iglesia de Santo Domingo, siendo amortajado con el hábito de esta Orden, ya que era hermano de la misma, en la que había alcanzado el cargo de prior. Fue comerciante con una sólida posición económica, italiano emigrado a Cádiz y luego a América en 1751, naturalizado en el año 1769, con cierta notoriedad en el Municipio, alcanzando en la milicia el grado de Capitán, conferido en 1772 por el Gobernador Vertiz. En 1778 ingresó en la administración de Aduana de Buenos Aires, en 1781 fue designado Regidor, alférez real y síndico general del Cabildo de Buenos Aires.
         
 15 DE OCTUBRE DE 1795     Invocando razones de salud, Manuel Belgrano pide que se nombre al doctor Juan José Castelli para suplirlo en su oficio de Secretario del Consulado de Buenos Aires.

15  DE  JUNIO  DE  1796     Manuel Belgrano  lee su memoria en el Consulado, cuyo título es: " Medios generales de fomentar la agricultura, animar la industria y proteger el comercio en un país agricultor". En dicho trabajo advertía sobre la necesidad de fomentar la ganadería, junto a la agricultura. Sabía de la abundancia de los ganados, si bien no conocía lo necesario para hablar con precisión de este tema. Sin embargo, recomendaba la cría del ganado lanar, por las utilidades que proporcionaba, y señalaba la necesidad de que éste fuera abundante “y arreglar su esquileo”. Asimismo, propuso la creación de escuelas de hilaza de lana.

16 DE JUNIO DE 1796     Con relación al algodón, en la Memoria de la fecha, Manuel Belgrano, como Secretario del Consulado de Comercio de Buenos Aires, hacía referencia a la necesidad de establecer escuelas de hilazas de lana y de algodón, o al menos que se procediera al desmote y limpieza de este último. El algodón era abundante en las áreas del Paraguay y Chaco, entre otras. Si bien no prosperó el proyecto de crear “escuelas de hilazas de lana”, se estableció un premio para las mejores hilanderas del Colegio de San Miguel Arcángel -de niñas huérfanas-. El primer premio estaba destinado a una niña mayor de 16 años y el segundo premio a una menor de esa edad. Ascendían a 30 y 40 pesos fuertes, y se exigía “una libra de algodón, hilado igual, delgado y pastoso. En Acta del 22 de diciembre de 1798, se asignaron los premios a María de Jesús y Eugenia López y se archivaron las hilazas, como constancia de su trabajo.

9 DE JUNIO DE 1797     Manuel Belgrano lee en el Consulado su memoria titulada: "Utilidades que resultarán a esta Provincia y a la Península el cultivo del lino y cáñamo, modo de hacerlo; la tierra más conveniente para él; modo de cosechar estos dos ramos y por último se proponen los medios de empeñar a nuestros labradores para que se dediquen con constancia a este ramo de agricultura".

14  DE  JUNIO  DE  1798     Manuel Belgrano lee en el Consulado su Memoria sobre agricultura y comercio.

 29  DE MAYO DE 1799     Por iniciativa de Manuel Belgrano se inauguró la escuela de geometría, arquitectura, perspectiva y toda clase de dibujo. Contó con el profesor Juan Antonio Gaspar Hernández, y se inscribieron 58 alumnos, correspondiendo a Belgrano el discurso de apertura en reconocimiento de sus esfuerzos, y del éxito de las gestiones por él realizadas. En octubre se distribuyeron medallas de plata acuñadas en Potosí. El vasto plan que Belgrano proponía en la Memoria de 1796 abarcaba la creación de escuelas de agricultura, dibujo, arquitectura, primarias para niñas, de hilazas de lana, comercio y náutica. En ellas se refiere a los beneficios de una escuela de dibujo y arquitectura indispensable para el ejercicio de las profesiones y el adelanto industrial. Brega por su fundación en las principales ciudades del Virreinato y, sobre todo, en Buenos Aires. Afirma que el estudio del dibujo debe ser obligatorio para los artesanos que aspiran a maestros y afirma que el dibujo "es el alma de las artes". En la memoria del 14 de junio de 1798 vuelve a insistir en las ventajas del arte y en la conveniencia de otorgar premios. El reglamento disponía la provisión de útiles a alumnos pobres, y permitía la admisión de aficionados al dibujo que quisieran ejercitarse.  La Academia no iba a tener larga vida. Por Orden Real del 4 de abril de 1800 se manifestaba al Consulado que no se dispondría de dinero para mantenerla. A pesar de ello el Consulado pretendió seguir sosteniendo la Academia pero sin éxito; y por otra Real Orden del 26 de julio de 1804 fue finalmente clausurada.

  DE AGOSTO DE 1799     Fallece Doña María Josefa González Casero (1742-1799), madre de Manuel Belgrano, era criolla, hija de Don Juan Manuel Gonzáles Islas y de Doña Inés Casero. Una distinguida familia de Buenos Aires.

15 DE NOVIEMBRE DE 1799     En la fecha y en relación al fomento de la producción de lino y cáñamo, Manuel Belgrano -como Secretario del Consulado-, envió una comunicación a Salas, que también firmaron los miembros consulares Francisco Ugarte, Ramón Jiménez y Eugenio Balbastro. Informaba que Buenaventura Marcó acababa de pasar a la Secretaría del Consulado una nota  con una cajita con muestras de cáñamo y lino que éste remitiera a Manuel Cano, vecino de Cádiz, hilado y blanqueado en Madrid y tejido en La Coruña. Anunciaba que por el primero que se presentara, la dirigirían a él y que esperaban que esa industria prosperase para felicidad de ese reino y quitar a los extranjeros los numerosos tesoros que arrancaban a España y a sus dominios.

15 DE ABRIL DE 1804     Belgrano estuvo en contacto con Juan Carrillo de Albornoz, Regidor y Sargento Mayor del Regimiento de Milicias de Cochabamba, y Diputado de esta Ciudad ante el Consulado de Buenos Aires. Juan Carrillo de Albornoz remitió una extensa memoria acerca de la mejora del tejido de algodón al Consulado de Buenos Aires en esa fecha. Los intentos de mejorar la calidad de los lienzos de algodón y uniformar las medidas de los mismos estaban en relación con el hecho de tener que competir con el algodón catalán y el inglés. El producto importado perjudicó en gran medida la producción de algodón en áreas como Cochabamba y Catamarca.

9  DE  JUNIO  DE  1806     Le confieren a Manuel Belgrano el grado de capitán de Milicias Urbanas en el marco de las Invasiones Inglesas.

25 DE JUNIO DE 1806     Manuel Belgrano se presenta en el Fuerte de Buenos Aires para incorporarse a las compañías que lucharán contra los invasores ingleses.

 28  DE  JUNIO DE  1806     Para no prestar juramento de obediencia al Gobernador británico de la "Nueva Arcadia" (nombre que impuso Beresford a la Buenos Aires –ocupada-, y sus adyacencias), Manuel Belgrano fuga a la Banda Oriental.

8  DE  OCTUBRE  DE  1806     Manuel Belgrano es designado Sargento Mayor del Regimiento de Patricios

5, 6 y 7 DE JULIO DE 1807     Manuel Belgrano participa de la Defensa de la Ciudad como ayudante en el Cuartel General al mando del coronel César Balbiani, durante la 2ª Invasión Inglesa.
  
1 DE ENERO DE 1809     Manuel Belgrano se opone al movimiento dirigido por Martín de Álzaga para derrocar al Virrey Santiago de Liniers.

3  DE MARZO  DE  1810     Aparece el primer número del Correo de Comercio, bajo la dirección de Manuel Belgrano.  Su última publicación fue el 6 de abril de 1811, salía semanalmente y estaba compuesto por 8 páginas; el precio era de un peso en Buenos Aires y de 12 Reales en otros poblados distantes.

18 DE MAYO DE 1810     En compañía de Cornelio SaavedraManuel Belgrano intima al alcalde de primer voto, Lezica, para que sin demora alguna se celebre un Cabildo Abierto.

19  DE  MAYO  DE  1810     Respecto a la producción textil alto peruana, Belgrano se ocupó de la de Oruro, en un artículo del Correo de Comercio de la fecha. En este caso, reprodujo uno que había aparecido diez años antes en el Correo Mercantil de España y sus Indias, donde se detallaba la actividad textil de esa área. Ese artículo se ocupaba de la elaboración de tucuyos (tela burda de algodón). Esta se realizaba con instrumentos rudimentarios y era una actividad que no se encontraba en un buen momento. Advertimos, que si bien existía una importante producción de lienzos de algodón (tucuyos) y ropa de lana en todo el Alto Perú, se importaban ponchos, pellones y grana de Tucumán y Santiago del Estero. Asimismo, los “efectos de Castilla” llegaban vía Buenos Aires (Océano Atlántico), o bien por la vía del Pacífico, desde Arica.

19  DE MAYO DE 1810     Manuel Belgrano es admirable cuando adopta posiciones que le convierten en un verdadero estadista, pues avizora el futuro de la Patria Americana con indudable precisión. A seis días de la Revolución de Mayo de 1810, publica en el Correo de Comercio de Buenos Aires un artículo: “Grandeza y decadencia de los Imperios”, en donde define la cuestión nacional americana. “La unión es el pilar fundamental para el desarrollo armónico de los pueblos. La desunión es la ruina y la desolación”Belgrano, como alumno de la Escuela de Salamanca, pone el acento en la integración de los pueblos de América y, hasta podríamos decir, que desarrolla un ideal panamericano cuando elogia la acción de Jorge Washington, respecto al pueblo de los Estados Unidos, al publicar en 1813, la despedida de este ilustre patriota al pueblo estadounidense.

30 DE JUNIO DE 1810     Un mes después de la Revolución de Mayo, en un artículo titulado "Educación”, el Correo de Comercio sentaba una declaración de principio sobre las influencias ideológicas y filosóficas de esos grupos que venían bregando (en las tertulias, en escritos, y en la prensa colonial) por una mayor apertura a las nuevas ideas. Es casi seguro que esas palabras hayan sido escritas también por Belgrano. Es que el desarrollo de una cultura ilustrada en el Río de la Plata se produjo en las últimas décadas de la Colonia y dentro del orden colonial español, y se hizo mucho más visible (el rol de la prensa) entre 1800 y 1810. Belgrano fue protagonista central de esta tendencia.

4  DE  JULIO DE 1810     Manuel Belgrano es nombrado por el Gobierno, presidente de la Junta de Monte Pío de Ministros de Justicia y Real Hacienda. Los montes píos eran fondos, cajas o depósitos de dinero formados ordinariamente con autorización del Gobierno, y previa aprobación de sus estatutos; con los descuentos que se hacían a los individuos de algún cuerpo o clase, o por contribución de los mismos para pensionar a sus viudas o huérfanos o facilitarles auxilio en su vejez y enfermedades. Fueron creados en distintas épocas siendo su objeto evitar la mísera situación a que quedaban.

19  DE  AGOSTO  DE  1810     Se funda por orden de Manuel Belgrano la Escuela de Matemáticas, que es puesta bajo su protección.

23 DE SEPTIEMBRE DE 1810     La Junta amplía un nombramiento anterior, designando a Belgrano Jefe de las fuerzas de la Banda Oriental, Santa Fe, Corrientes y Paraguay.

27 DE SEPTIEMBRE DE 1810     Manuel Belgrano llega a San Nicolás de los Arroyos, donde se hace cargo de los efectivos de la Expedición Auxiliar al Paraguay.

28 DE SEPTIEMBRE DE 1810     Manuel Belgrano informa a la Junta sobre el armamento de su tropa, con los siguientes términos: " ... las carabinas son malísimas, y a los tres tiros quedan inútiles ... ".

1 DE OCTUBRE DE 1810     Manuel Belgrano llega a Santa Fe en marcha la Paraguay. Sus Instrucciones decían que allí debía incorporar 200 hombres. Sin embargo la única Compañía de Blandengues existente era la del capitán Francisco Aldao con 100 hombres, de los cuales 40 eran veteranos y el resto reclutas. De estos 60 soldados procedían del Fuerte de Sunchales, de donde hizo retirar los 2 cañones de a 4. "No van en mi ejército los doscientos Blandengues de esta Ciudad porque no existen aún, pues se está levantando la 2ª Compañía, he mandado únicamente que vaya la Compañía del Capitán Aldao, agregada al Regimiento de Caballería de la Patria". Belgrano se quejó a la Junta por la falta de caballos "pertenecientes al Rey" pese a los recursos que se habían dispuesto. Pidió una investigación y el escarmiento de los "dilapidadores del Erario". Para compensar tuvo que intimar a los vecinos a hacer donaciones y "si no se hallase con tan buena voluntad se les satisfará el costo que se le causare en su conducción y el tiempo y distancia que se emplearan conforme al orden de las postas". Se recibieron donaciones y ofrecimientos. Por su contribución a la expedición, Belgrano otorgó a la ciudad el título de “Muy Noble”

17 DE DICIEMBRE DE 1810     Atento a que una partida realista hostilizó sus fuerzas, Manuel Belgrano rompe el armisticio que había propuesto al gobierno de Asunción. 

19 DE DICIEMBRE DE 1810     En marcha hacia el Paraguay, Manuel Belgrano cruza el río Paraná y vence a los realistas en Campichuelo (Puesto de observación paraguayo, a la altura de Candelaria –Misiones) . Con salvas de artillería, repiques de campanas y gran alegría recibió Buenos Aires el parte de la acción y la bandera capturada en Campichuelo, la cual con importante ceremonia y acompañamiento fue depositada "con gran aplauso en la Sala Capitular (del Cabildo) para eterno monumento de las Glorias del país".

19  DE  ABRIL  DE  1811     El  5 y 6 de abril en Buenos Aires se produce un golpe cívico-militar, por el cual el sector moderado, partidario de Cornelio Saavedra -denominado saavedrista-, se aseguró el control de la Junta Grande de gobierno, eliminando a la minoría radical partidaria de Mariano Moreno -llamada morenista-.  El 19 de abril Manuel Belgrano es separado del mando del Ejército de la Banda Oriental y sometido a proceso por el fracaso en la Expedición al Paraguay.

6  DE  JUNIO DE 1811     Comienza en Buenos Aires, por orden de la Junta Grande, el proceso a Manuel Belgrano con motivo de la expedición al Paraguay. La Junta designó como Juez Fiscal al coronel Marcos González Balcarce, partidario de Saavedra, y que junto con otros militares había firmado el petitorio donde se pedía su enjuiciamiento. Su misión era formar la causa reuniendo información y tomando las declaraciones correspondientes.

20 DE JUNIO DE 1811     Los jefes y oficiales que sirvieron bajo sus órdenes elevan oficios al Gobierno en defensa de Manuel Belgrano, en el proceso que se le instruyó con motivo de la expedición al Paraguay.

1° DE AGOSTO DE 1811    El Coronel Manuel Belgrano es nombrado representante de la Junta, encomendándosele una misión diplomática al Paraguay. El 9 de agosto la Junta también declaró que Belgrano se había conducido con valor y patriotismo en el mando de la expedición al Paraguay y le repusieron todos los rangos y honores que se le habían suspendido, terminándose así el proceso que se había formado en su contra. Belgrano aceptó la misión y fue acompañado por su amigo el Dr. Vicente Anastasio de Echevarría, hermano de María Catalina Echevarría de Vidal, la que tenía una casa de descanso en San Lorenzo. Sin duda no se alojaron en la Posta del Espinillo, sino que pararon en San Lorenzo a descansar.

09  DE  AGOSTO  DE  1811    Se cierra el proceso iniciado a Manuel Belgrano por la expedición al Paraguay. Teniendo en cuanta lo "expuesto por el Exmo. Cabildo, Alcaldes de barrio y oficiales del ejército" se declaró que Manuel Belgrano: "... se ha conducido en el mando de aquel ejército con un valor, celo y constancia dignos de reconocimiento de la Patria; en consecuencia queda repuesto a los grados y honores que obtenía y que se le suspendieron en conformidad de lo acordado en las peticiones del 6 de abril; y para satisfacción del público y de este benemérito patriota, publíquese este decreto en La Gazeta".

18 DE AGOSTO DE 1811     En el Libro I de Misas del Convento San Carlos de San Lorenzo, (1786-1887) en el folio 172, aparece, el siguiente asiento: "09 (no es fecha, son los 9 pesos de las misas) -Mas, un novenario que encomendó el Sor. Dn. Manuel Belgrano, y por su limosna dio nueve ps. $ 009". Ha quedado registrado así el paso por San Lorenzo del Cnel. Manuel Belgrano y de su estadía en el Convento para descansar y quizás reflexionar sobre la misión diplomática que le había sido asignada. 

12  DE  OCTUBRE DE 1811     Manuel Belgrano y Vicente Anastasio de Echevarría, firman el Tratado de Amistad, Auxilio y Comercio, reconociendo el gobierno de Buenos Aires la autonomía de la Provincia del Paraguay hasta la celebración de un congreso general que decidiera la forma de gobierno.

13  DE  NOVIEMBRE   DE  1811     Manuel Belgrano es designado con el grado de Coronel (es decir jefe) del Regimiento Nº 1 de "Patricios".

15 DE NOVIEMBRE  DE  1811     Manuel Belgrano renuncia a la mitad de su sueldo como jefe del Regimiento de Patricios " ... en obsequio de la Patria, ofrezco a V.E. la mitad del sueldo que me corresponde, siéndome sensible no poder hacer demostración mayor, pues mis facultades son ningunas y mi subsistencia depende de aquél, pero en todo evento sabré también reducirme a la ración del soldado, si es necesario, para salvar la justa causa que con tanto honor sostiene V.E. ..".

27 DE FEBRERO DE 1812     El Coronel Manuel Belgrano enarbola por primera vez, en las Barrancas del río Paraná, en la Villa del Rosario, la Bandera Nacional.  La tradición local señala que esa primera bandera fue confeccionada por una vecina de Rosario: María Catalina Echevarría de Vidal, y quien tuvo el honor de izar la enseña fue el civil Cosme Maciel, también vecino de Rosario. Belgrano exclamó frente a las tropas: ¡Soldados de la Patria! En este punto hemos tenido la gloria de vestir la escarapela nacional que ha designado nuestro Excmo. Gobierno: en aquel, la batería de la Independencia, nuestras armas aumentaran las suyas; juremos vencer a nuestros enemigos interiores y exteriores, y la América del Sur será el templo de la Independencia y de la Libertad. En fe de que así lo juráis, decid conmigo ¡Viva la Patria! Señor capitán y tropa destinada por la primera vez á la batería Independencia; id, posesionaos de ella, y cumplid el juramento que acabáis de hacer.”.   Ofició al Gobierno de Buenos Aires: “Excmo. Señor, En este momento, que son las seis y media de la tarde, se ha hecho salva en la batería de la Independencia, y queda con la dotación competente para los tres cañones que se han colocado, las municiones y la guarnición. He dispuesto para entusiasmar las tropas y á estos habitantes, que se formasen todas aquellas, y les hablé en los términos de la copia que acompaño. Siendo preciso enarbolar bandera, y no teniéndola, la mandé hacer blanca y celeste, conforme a los colores de la escarapela nacional: espero que sea de la aprobación de Vuestra Excelencia. Rosario, 27 de febrero de 1812. Excmo. Señor, Manuel Belgrano. Excmo. Gobierno Superior de las Provincias del Rio de la Plata.”.

3  DE  MARZO DE 1812     El gobierno desaprueba la creación de la nueva Bandera en Rosario. La bandera de Belgrano, como veremos, tuvo que esperar hasta que el Congreso de Tucumán, poco después de proclamarse nuestra Independencia, estableciera por Ley del 25 de julio de 1816, la adopción de una bandera con los colores “celeste y blanco”, tal como la había creado Belgrano el 27 de febrero de 1812.

12 DE MARZO DE 1812     María Josefa Ezcurra (hermana de Encarnación Ezcurra, la mujer de Juan Manuel de Rosas), viajó a Jujuy en la diligencia “Mensajería de Tucumán”. Tras cincuenta días llegó a Jujuy donde se reunió con Manuel Belgrano.  Habían iniciado su idilio en 1802. María Josefa lo acompañó en varias de sus campañas, sin hacer caso a los mandatos sociales de la época. Se reunieron en Salta, en el mes de marzo de 1812, cuando Belgrano se hizo cargo del Ejército del Norte. Participó junto a él en el “Exodo Jujeño”,  y presenció la batalla de Tucumán, quedando en esa época, embarazada. El 29 de julio de 1813 nacería el hijo llamado Pedro, que ninguno de los dos padres reconoció, por lo que fue adoptado por Juan Manuel de Rosas, y fue criado en una de las estancias del matrimonio compuesto por la hermana de Josefa y Rosas, bautizándolo con el nombre de Pedro Pablo Rosas y Belgrano. Belgrano en su testamento expresa que no tenía descendientes. Sabemos que en realidad dejaba en este mundo, “un niño de siete años, el mencionado Pedro Pablo y una criatura de un año de edad que tenía por nombre Manuela Mónica del Corazón de Jesús”.

3 DE ABRIL DE 1812     Don Juan Martín de Pueyrredón, quien había sido designado Comandante del Ejército Auxiliar del Perú, al llegar a Jujuy elevó su renuncia, aduciendo razones de salud, y fue remplazado por el Cnl. Manuel Belgrano, que se recibió del mando en la posta de La Ciénaga, en la fecha.

27 DE JUNIO DE 1812     El Gobierno (el Primer Triunvirato), desautorizaba en duros términos la creación de la bandera, y ordenaba a M. Belgrano que: “haga pasar por un rasgo de entusiasmo el suceso de la bandera blanca y celeste enarbolada, ocultándola disimuladamente y subrogándola con la que se le envía, que es la que hasta ahora se usa en esta fortaleza que hace el centro del Estado; procurando en adelante no prevenir las deliberaciones del gobierno en materia de tanta importancia [...] El gobierno, pues, consecuente con la confianza que ha depositado en V.S. no puede hacer más que dejar a la prudencia de V.S. misma la reparación de tamaño desorden; pero debe igualmente prevenirle que ésta será la última vez que sacrificará hasta tan alto punto los respetos de su autoridad y los intereses de la Nación”.

 14  DE  JULIO  DE  1812     Estando Manuel Belgrano en Jujuy, publica un bando apelando al sentimiento patriótico para integrar las filas del Ejército. No admitía excepciones fundadas en la riqueza, ya que no podía tolerar que "sea sólo carga de los pobres miserables exponer su vida para que los poderosos se mantengan gozando del sudor de aquellos mismos"

18  DE JULIO DE 1812     Manuel Belgrano expresa al Triunvirato, no haber recibido la orden del 3 de marzo (que le ordenaba esconder la bandera creada el 27 de febrero), asegurando que reservará la Bandera para el día de una gran victoria.
  
 29 DE JULIO DE 1812     A pesar de no estar de acuerdo con la orden de replegarse con su ejército hacia la ciudad de Córdoba, impartida por el Primer Triunvirato (firmada por dos de los tres triunviros, pero refrendada por el poderoso ministro Bernardino Rivadavia), previo paso por la ciudad de Tucumán, para requisar armamento y levantar la fábrica de armas que allí se estaba instalando; el 29 de julio de 1812, Belgrano dictó un bando que disponía la emigración del pueblo jujeño:  “Pueblo jujeño –escribía– la Patria le reclama un gran sacrificio: abandonar la ciudad y las fincas, quemar los campos sembrados, arrear los animales. A los ojos del español invasor, sólo debe quedar tierra arrasada”. Al otro día, el síndico procurador del Cabildo de Jujuy, sin comprender los alcances del bando, se dirige a Belgrano pidiéndole su derogación o modificación. Él rechaza la insinuación del Cabildo jujeño. "No busco plata con mis providencias", dice enérgicamente. Sus medidas tienden a privar de recursos al enemigo que avanza desde el norte.

 1° DE AGOSTO DE 1812     Manuel Belgrano contesta al Teniente de Gobernador de Salta que, a pesar de ofrecer colaboración, deseaba la atenuación del bando del éxodo: "... Mi bando se ha de cumplir con la mayor exactitud posible; yo no oigo los clamores de los particulares, sino el bien general de la Patria, y éste es el que me ha obligado a dictarlo: el amor patriótico debe hacer callar los lamentos y vencer los imposibles mismos; mis medidas están tomadas y ellas se han de llevar a cabo sin réplica ni excusa..."

4  DE  AGOSTO  DE  1812     El Gral. Manuel Belgrano  informa al Gobierno porteño desde Jujuy sobre lo ocurrido el 27 de mayo de 1812, en la ciudad de Cochabamba, en dónde el General realista Goyeneche, después de vencer en la batalla de Pocona, atacó la ciudad. En ella fueron principalmente mujeres las que se atrincheraron en la punta de la colina de San Sebastián, en el lugar conocido como La Coronilla, a unos 1400 mts. del centro de Cochabamba (actualmente en el centro de la ciudad), donde los soldados realistas las masacraron. En ese informe el prócer dice que desde ese día en su campamento: "Todas las noches, a la hora de la lista, un oficial de cada cuerpo militar pregunta en alta voz: «¿Están presentes las mujeres de Cochabamba?». Y otro oficial responde: «Gloria a Dios, han muerto todas por la Patria en el campo del honor» [y agrega] ¡Gloria a las cochabambinas que se han demostrado con un entusiasmo tan digno de que pase a la memoria de las generaciones venideras! Ellas han dado un ejemplo que debe excitar, señor excelentísimo, los sentimientos más apagados por la Patria, y estoy seguro de que no será el último con que confundan a las de su sexo que, alucinadas, trabajan en contra de la causa sagrada, y aun a los hombres que prefieren la esclavitud, por no exponer sus vidas para asegurar nuestros justos derechos".

12 DE AGOSTO DE 1812     El Consulado de Buenos Aires, de acuerdo con los informes de su delegado en Jujuy, pide al gobierno que atenúe el bando de Belgrano.

14 DE AGOSTO DE 1812     El Gobierno porteño, sin esperar mayores razones de Manuel Belgrano, hizo suyo el informe de Jujuy, desaprobando al General y ordenando modificaciones al Bando del Éxodo.

23 DE AGOSTO DE 1812     El Alcalde de Barrio, don José Manuel Beruti, enarbola por primera vez en Buenos Aires la bandera celeste y blanca, en adhesión a la causa patriótica, en la torre de la iglesia de San Nicolás de Bari (lugar actual del Obelisco), al celebrarse un oficio para festejar el aplastamiento de la conjuración de Alzaga, la bandera flameó en las narices de uno de los triunviros, Miguel de Azcuénaga, que asistió a ese acto..

23 DE AGOSTO DE 1812     El pueblo de Jujuy se encolumnó detrás del Ejército del Norte en retirada, para dejar sin recursos al enemigo. La gesta fue antecedente inmediato de los triunfos de Tucumán y Salta. El Éxodo Jujeño, constituye uno de los acontecimientos más heroicos de la historia argentina. Su protagonista fue el Pueblo, en todas sus clases sociales, de esa provincia argentina Del éxodo participaron aproximadamente 1500 personas de un total de 2500 a 3500 con que contaba la ciudad y jurisdicción de Jujuy, acompañados por refugiados procedentes de Tarija y Chichas (actual Estado Plurinacional de Bolivia). El significado del Éxodo, además, está estrechamente ligado a dos sucesos fundamentales que ocurrirán en los seis meses posteriores: la batalla de Tucumán, el 24 de septiembre de 1812, y la batalla de Salta, el 20 de febrero de 1813. Ambas fueron contundentes victorias de los patriotas sobre los realistas, de importancia clave para la suerte de la revolución de la independencia.
  
03  DE  SEPTIEMBRE  DE  1812     Durante el desarrollo de la segunda campaña al Alto Perú, Belgrano se encuentra retrocediendo con su ejército hacia Tucumán, en cumplimiento de las órdenes recibidas del Primer Triunvirato, para reorganizar el ejército tras la derrota de Huaqui. Perseguido por un destacamento de 600 realistas enviado por el general español Pío Tristán, Belgrano decide desplegar su retaguardia a órdenes del Mayor General Diaz Vélez sobre la margen sur del río Las Piedras, con el fin de detenerlos y dar tiempo al grueso de la columna. Inicialmente, la carga al trote de los españoles dispersó a la retaguardia patriota. Al advertir la desordenada retirada de su retaguardia Belgrano despliega en posición ventajosa al grueso y recibe con su artillería a los envalentonados realistas. El fuego de los cañones detiene el avance realista. Los patriotas en tres columnas se lanzan al ataque coordinando la acción contra el frente y los flancos del enemigo provocando su precipitada retirada, dejando en el campo de combate 20 muertos y 25 prisioneros. Con esta victoria conocida como primero Combate de La Piedras, Belgrano afianzó la decaída moral de las tropas y continuó su marcha hacia Tucumán.

07  DE  SEPTIEMBRE  DE  1812     Belgrano escribe al gobierno: "Es muy doloroso tener que ir retrogradando (por sus órdenes de seguir retrocediendo), y no ver el término de esta campaña, cuando las tropas han tomado un fuego y una energía extraordinaria con la actitud del 3 (primer combate de Las Piedras) ... Yo quisiera hacer prodigios por la Patria y por el honor de sus armas".

09 DE SEPTIEMBRE DE 1812     ANIVERSARIO DE LA "ENCRUCIJADA DE BURRUYACÚ" CUNA DE LA DESOBEDIENCIA QUE SALVO A LA REVOLUCION. En septiembre de 1812 Manuel Belgrano, con el Ejército del Norte, venía en retirada desde Jujuy con rumbo a Córdoba, con la orden del Triunvirato de abandonar las Provincias del norte a la ira de los realistas, quiénes avanzaban ajusticiando de manera cruel a los revolucionarios. Los jujeños, en su éxodo, habían abandonado sus posesiones más preciadas y acompañaban al General en esa penosa marcha. La situación para Tucumán era de extremo peligro, ya que era conocido el apoyo del Cabildo y del pueblo tucumano al Movimiento de Mayo. En ninguna otra parte sería tan duro el escarmiento como en San Miguel de Tucumán; por ello muchos abandonaban la población, rumbo a sus estancias o a Provincias vecinas. "Fue en esos momentos de nerviosismo general que llegó a Tucumán el teniente coronel Juan Ramón Balcarce, enviado por Belgrano. A poco de arribar dispuso que todos presentaran las armas que tuviesen. Se le entregaron las escopetas, sables, pistolas y hasta espadines de los cabildantes, de lo que se apoderó el señor Balcarce sin más excepción de mi sable y pistolas, que como oficial me fueron devueltas. La requisa (...) exaltó a los ánimos de los patriotas tucumanos, y muy notablemente el del señor Bernabé Aráoz, (...) en cuya casa se practicó una reunión de vecinos y se acordó por unanimidad nombrar una comisión  ante el comandante Balcarce. Esa comisión formada en casa de Aráoz debía manifestarle el disgusto del vecindario por el hecho de desarmarlo e inutilizarle así los esfuerzos generosos que ofrecerían, si el ejército se resolvía a ayudarlos en la defensa. Al encontrarse con el General Belgrano, (en el paraje de la encrucijada, actual departamento de Burruyacu), éste pidió mil hombres montados y una suma de dinero, y el señor don Bernabé contestó que en lugar de mil serían dos mil lo que ofrecía, y en cuanto a la suma de dinero, dijo que sería llenada inmediatamente. Ello fue en sí, lo que decidió a Belgrano a presentar batalla. Fue entonces en LA ENCRUCIJADA, donde Belgrano tomó la histórica determinación de desobedecer las órdenes de Buenos Aires y jugarse al todo o nada en una batalla imposible de ganar.

 12  DE  SEPTIEMBRE   DE  1812     Manuel Belgrano recibe oficio del Gobierno que le ordena retirarse con su Ejército a Córdoba.
  
12 DE SEPTIEMBRE DE  1812     Belgrano informa al gobierno que decide quedarse en Tucumán y presentar batalla. "Son muy apuradas las circunstancias y no hallo otro medio que exponerme a una nueva acción: los enemigos vienen siguiéndonos. El trabajo es muy grande; si me retiro y me cargan, todo se pierde y con ello nuestro total crédito. La gente de esta jurisdicción se ha decidido a sacrificarse con nosotros, si se trata de defenderla y de no, no nos seguirán y lo abandonarán todo: pienso aprovecharme de su espíritu público y energía para contener al enemigo, si me es dable, o para ganar tiempo a fin de que se salve cuanto pertenece al Estado. Cualquiera de los dos objetos que consiga es un triunfo y no hay otro arbitrio que exponerse. Acaso la suerte de la guerra nos sea favorable, animados como están los soldados y deseosos de distinguirse en una nueva acción. Es de necesidad aprovechar tan nobles sentimientos, que son obra del cielo, que tal vez empieza a protegernos para humillar la soberbia con que vienen los enemigos, con la esperanza de hacer tremolar sus banderas en esta capital. Nada dejaré por hacer; nuestra situación es terrible y veo que la Patria exige de nosotros el último sacrificio para contener los desastres que la amenazan".

 14  DE SEPTIEMBRE DE 1812     Belgrano escribe al Secretario del Triunvirato Bernardino Rivadavia, anunciándole su determinación de hacer frente a los realistas en Tucumán, en respuesta a la orden de retroceder hasta Córdoba: “El último medio que me queda es hacer el último esfuerzo, presentando batalla fuera del pueblo, y en caso desgraciado encerrarme en la plaza hasta concluir con honor. Esta es mi resolución, que espero tenga buena fortuna. Algo es preciso aventurar y esta es la ocasión de hacerlo. ¡Felices nosotros si podemos conseguir nuestro fin, y dar a la patria un día de satisfacción, después de las amarguras que estamos pasando!".


15  DE SEPTIEMBRE DE 1812     Se produjo una anécdota que no por conocida, merece ser obviada, porque habla tanto de la personalidad de Belgrano como de su particular sentido del humor. El Brigadier realista Pío Tristán (amigo-enemigo del General Manuel Belgrano) se enteró en seguida, naturalmente, de la captura de su subordinado (en el combate de Piedras el -3 de septiembre de 1812- uno de los jefes españoles, el Coronel Huici, un portaestandarte y hasta el capellán de las fuerzas adversarias), y le envió entonces una nota a Belgrano. Allí le recordó que el Coronel debía ser tratado con decoro y humanidad, no sin olvidar que él también tenía en su poder varios cautivos patriotas. Tristán acompañó sus líneas con cincuenta onzas de oro, sin especificar qué destino debía dárseles, pero el final de la carta es el siguiente: “Campamento del Ejército Grande, septiembre 15 de 1812”.

 17  DE  SEPTIEMBRE  DE 1812     El General Manuel Belgrano contestó el mensaje del 15 de septiembre tranquilizando al Brigadier Pio Tristan y, devolviéndole las cincuenta onzas de oro, con el pedido de que fueran distribuidas entre sus soldados prisioneros. Y al concluir, se refleja aquí el delicado sarcasmo de su espíritu: “Cuartel General del Ejército Chico, 17 de septiembre de 1812”. Ni Campamento ni Ejército Grande. Sólo Cuartel General y apenas Ejército Chico.

 24   DE  SEPTIEMBRE  DE  1812    La Batalla de Tucumán fue un enfrentamiento armado librado entre el  24 y el 25 de septiembre de 1812, en las inmediaciones de la ciudad de San Miguel de Tucumán, durante la Segunda Expedición Auxiliadora al Alto Perú, en el curso de la Guerra de la Independencia Argentina. El Ejército del Norte, al mando del General Manuel Belgrano, a quien secundara el Coronel Eustoquio Díaz Vélez en su carácter de Mayor General, derrotó a las tropas realistas del brigadier Juan Pío Tristán, que lo doblaban en número, deteniendo el avance realista sobre el noroeste argentino. El resultado fue que el Creador de la Bandera contabilizó al menos setecientos prisioneros, no solamente soldados, sino jefes y oficiales, además de banderas, una nutrida artillería y un profuso parque militar. Es cierto que en el campo de batalla habían quedado los cadáveres de ochenta patriotas, pero también cuatrocientos cincuenta muertos enemigos, doscientos heridos y centenares de prisioneros.

24  DE SEPTIEMBRE DE 1812    Convento de San Francisco en Tucumán. El predio del convento funcionó como Cuartel General del Ejército del Norte comandando por el General Manuel Belgrano en 1812, y en ese suelo recibieron sepultura los héroes caídos, en esa fecha. Además, en una de las alas del histórico convento, Manuel Belgrano organizó el “Hospital de Sangre”, en donde se atendieron a los soldados heridos de la batalla. El Sacristán Miguel Gómez indicó que el actual comedor del convento, que fue construido a mediados del siglo XVIII, fue la habitación privada del General Manuel Belgrano. “Sus venerables muros atesoran tras largos años de silencios gran parte de la intimidad del prócer Creador de nuestra Bandera”.

26  DE  SEPTIEMBRE  DE  1812    Manuel Belgrano envía al Gobierno, el parte de la batalla de Tucumán, dando cuenta de la victoria.
"Excelentísimo Señor.    La Patria puede gloriarse de la completa victoria que han obtenido sus armas el día 24 de corriente. Día de Nuestra Señora de las Mercedes bajo cuya protección nos pusimos: siete cañones, tres banderas y un estandarte, cincuenta oficiales, cuatro capellanes, dos curas, seiscientos prisioneros, cuatrocientos muertos, las municiones de cañón y de fusil, todos los bagajes, y aun la mayor parte de sus equipajes, son el resultado de ella: al enemigo le he mandado perseguir, pues con sus restos va en precipitada fuga: daré a Vuestra Excelencia un parte pormenor, luego que las circunstancias me lo permitan. Dios guíe a Vuestra Excelencia muchos años. Tucumán 26 de septiembre de 1812".  Excelentísimo Señor Manuel Belgrano".

08  DE  OCTUBRE  DE  1812    El Primer Triunvirato cayó, siendo sucedido por el Segundo Triunvirato, integrado por Juan José Paso, Nicolás Rodríguez Peña y Antonio Álvarez Jonte. Este Gobierno decretó honores para los vencedores de Tucumán para el 20 de octubre de 1812; confiriéndole a Manuel Belgrano el título de Capitán General, cargo que declinó, aunque aceptó ejercer las facultades que de él emanaban. Luego la Asamblea otorgó a Belgrano la suma de 40.000 pesos como premio, que él destinó a la dotación y sostenimiento de cuatro escuelas.

10 DE OCTUBRE DE 1812    Derrocado el Primer Triunvirato por los efectos políticos conocidos y la inteligente intervención de San Martín, el 8 de octubre de 1812 asume sus funciones el Segundo Triunvirato. Dos días después, el flamante gobierno le remitió un documento a Belgrano con fervorosas felicitaciones por el triunfo de Tucumán. Y diez jornadas más tarde llegó un total reconocimiento: Manuel Belgrano fue ascendido a Capitán General y se le confirió un escudo de oro. Todos los combatientes -desde los soldados hasta los oficiales recibieron distintas y preciadas recompensas.

18 DE OCTUBRE DE 1812     Manuel Belgrano le escribe al General realista Goyeneche, proponiéndole un arreglo pacífico después de la Batalla de Tucumán. Al dar cuenta al gobierno de estas conversaciones, expresa: " mi propuesta (...) es reducida a que se deje en libertad a los pueblos para la elección de diputados y la celebración del Congreso...". El Triunvirato no aprobó la actitud de tratar con el enemigo, pero Goyeneche le contestó el 29 de octubre expresando sus deseos de paz y enviándole un ejemplar de la nueva Constitución liberal española. Nuevamente, el Triunvirato se opuso a un arreglo pacífico.

20 DE OCTUBRE DE 1812     El gobierno le confiere a Manuel Belgrano los despachos de Capitán General. Éste declina el honor explicando: "... Sirvo a la Patria sin otro objeto que verla constituida, y este es el premio a que aspiro... "

12  DE  ENERO DE 1813     El Ejército del Norte, que ha vencido en Tucumán, inicia su marcha hacia Salta. Pío Tristán se había acantonado en Salta con 2500 hombres, a los que se podían agregar 500 que ocupaban Jujuy, y efectivos menores en Suipacha, Oruro, Cochabamba, Charcas y La Paz.

15  DE  ENERO  DE  1813     Manuel Belgrano, en un bando, publica el parte de Pío Tristán sobre la batalla de Tucumán, en que éste condenaba a muerte al que propalase su derrota.  Belgrano y Pío Tristán eran viejos conocidos (¿amigos?) pues habían estudiado juntos en España. Inclusive habían compartido pensión y "queridas". Eso explica el trato dado por Don Manuel a su adversario y a su tropa luego de Salta, acción que le costara luego ser enjuiciado en Bs.As.

1° DE FEBRERO DE 1813     Manuel Belgrano, escoltado por el Regimiento de Dragones de Milicias de Tucumán, partió de la ciudad. La marcha se hizo por divisiones, con grandes intervalos de tiempo. 

09, 10 y 11 DE FEBRERO DE 1813    Se emplearon en vadear el río Pasaje. Se celebró a continuación una ceremonia castrense, en la que se prestó juramento de obediencia a la Asamblea General Constituyente, que acababa de establecerse. Los oficiales y soldados hicieron el juramento ante una cruz formada por la espada de Belgrano y la bandera creada por él. A partir de ese momento el río pasó a llamarse Juramento.

16  DE  FEBRERO  DE  1813     La vanguardia patriota bajo el mando de Eustoquio Díaz Vélez chocó con las avanzadas de Pío Tristán, que ocupaban las alturas detrás de un riachuelo llamado Zanjón de Sosa. Belgrano estaba con el grueso del ejército en Punta del Agua y buscó emplear el factor sorpresa. Según refiere en su parte de batalla había tenido la intención de “sorprenderlo al enemigo totalmente hasta entrar por las calles de esta capital, las aguas me lo impidieron, y ya fueron indispensables otros movimientos; pues que habíamos sido descubiertos, respecto a que fue preciso dar algún descanso a la tropa y proporcionarle que secase su ropa, limpiar las armas, recorrer sus municiones y demás”. Detrás de la vanguardia, efectuó un envolvimiento con el grueso del Ejército por caminos de montaña, marchando 17 km en una jornada, guiado por el capitán salteño Apolinario Saravia.

18  DE  FEBRERO  DE  1813     Manuel Belgrano acampa en las inmediaciones de la posta de Lagunilla, a 15 km de su objetivo, la ciudad de Salta.

20 DE FEBRERO DE 1813      Batalla de Salta. Al mando de Manuel Belgrano el ejército patriota triunfa sobre el enemigo. Parte de la batalla de Salta. Excelentísimo Señor. El Todopoderoso ha coronado con una completa victoria nuestros trabajos arrollado, con las bayonetas y los sables, el Ejército, al mando de Dn Pío Tristán, se ha rendido del modo que aparece de la adjunta capitulación: no puedo dar a V. E. una noticia exacta de sus muertos y heridos, ni tampoco de los nuestros: lo cual haré más despacio, diciendo únicamente por lo pronto, que mi segundo, el Mayor Gral. Diaz Velez, ha sido atravesado en un muslo de bala de fusil, cuando ejercía sus funciones con el mayor denuedo, conduciendo la derecha del Ejército a la victoria: su desempeño, el del coronel Rodríguez, Jefe de la izquierda, y el de todos los demás comandantes de División, así de Infantería como de Caballería, e igualmente el de los oficiales de Artillería y demás cuerpos del Ejército ha sido el más digno y propio de Americanos libres que han jurado sostener la soberanía de las Provincias. Unidas del Río de la Plata; debiendo repetir a V. E. lo que le dije en mi parte de 24 de Septiembre pasado, que desde el último soldado hasta el jefe de mayor graduación, e igualmente el paisanaje se han hecho acreedores de la atención de sus conciudadanos y a las distinciones con que no dudo que. V. E. sabrá premiarles. — Dios guíe. a V. E. ms. as. 20 á la noche de Febrero de 1813. Excelentísimo Señor. Manuel Belgrano. Excelentísimo supremo Gobierno de las Provincias. Unidas del Río de la Plata.

21 DE FEBRERO DE 1813     Rendición de las tropas realistas tras la batalla de Salta. El enviado realista a parlamentar fue el coronel La Hera, quien negoció con Belgrano que los soldados salgan de la Ciudad con los honores de la guerra, a tambor batiente y con las banderas desplegadas, y que a las tres cuadras rindan las armas y entreguen los pertrechos de guerra, quedando obligados por juramento, desde el General hasta el último tambor, a no volver a tomar las armas contra la Provincias Unidas hasta los límites del Desaguadero. Belgrano devolverá todos los prisioneros, a cambio de igual actitud por parte de los realistas, quienes deberán entregar los prisioneros patriotas que tiene Goyeneche en el Alto Perú. Así desfilan 2.786 hombres, entregando 2.188 fusiles, 200 espadas, pistolas, carabinas, 10 cañones, todo el parque de guerra y tres banderas reales. Entre los prisioneros figuraron diecisiete jefes y oficiales realistas. La caballería echa pie a tierra y rinde sus sables y carabinas; la artillería entrega sus cañones, carros y municiones. Belgrano dispensa al general Tristán de la humillación de entregarle personalmente la espada, y lo abraza ante todos los presentes.

1º DE MARZO DE 1813     El General José Manuel de Goyeneche abandonó la Villa Imperial saqueando el Banco de Rescates y la Casa de Moneda. Este hecho llamó la atención de Manuel Belgrano, quien ya desde antes de ingresar a Potosí se preocupaba por el estado de la Casa de Moneda.

31 DE  MARZO DE 1813     Manuel Belgrano desde Jujuy, declina el premio de $40.000 otorgado por la Asamblea tras el triunfo de Salta para la creación de cuatro escuelas en Tarija, Jujuy, Tucumán y Santiago del Estero. "Fundar escuelas es sembrar en las almas".

3 DE MAYO DE 1813     Manuel  Belgrano remitió dos medallas al Poder Ejecutivo. Son las medallas conmemorativas de las batallas de Tucumán (24 de septiembre de 1812) y Salta (20 de febrero de 1813), que fueron acuñadas en Potosí antes que las fuerzas patriotas entraran en la Villa. Estas piezas de plata de 48,5 mm de módulo y alrededor de 49 g de peso, ostentan leyendas alusivas a las respectivas Batallas y un diseño similar, que incluye sendos trofeos, y una corona formada por una rama de palma y una de laurel unidas por una cinta. El canto de ambas medallas es parlante, y dice: “VIVA LA RELIGION, LA PATRIA Y LA UNION”. Esta leyenda es similar a la que ostentan otras piezas contemporáneas.

19  DE   JUNIO  DE  1813     Como vimos, la primera entrega de monedas patrias se produjo apenas unos días después de la llegada de Manuel Belgrano, que se produjo en la fecha. En Potosí, Belgrano desplegó todas sus dotes de administrador. Escuetamente, Mitre afirma: “[...] rehabilitó el Banco y la Casa de Moneda de Potosí, convirtiendo estos establecimientos en fuentes de renta (...)”.

21  DE   JUNIO  DE 1813     Tras la victoria en Salta Manuel Belgrano, en su avance al norte, establece el Cuartel General del Ejército en el Villa Imperial de Potosí.

4   DE   JULIO  DE 1813     Además de las piezas en plata, se acuñaron un ejemplar de cada medalla en oro de las Batallas de Tucumàn y Salta, los que fueron colocados en la “Tarja de Potosí”. La Tarja o Escudo de Potosí, fue obsequiada en la fecha a Manuel Belgrano por las damas de Potosí. Se trata de una joya de oro y plata, un tanto “barroca” en su composición, muy al estilo de aquella época. Sus dimensiones son de 1,70 m de alto por 1,03 m de ancho. Su costo fue estimado en 7.200 pesos fuertes (hoy incalculable), importante suma para aquel momento. Actualmente se encuentra en Buenos Aires, en el Museo Histórico Nacional. La joya fue remitida por Belgrano al Gobierno de Buenos Aires en diciembre de 1813, quien dispuso fuera colocada en los balcones del Cabildo porteño, donde el pueblo pudo admirarla durante varias semanas. La Tarja es un canto o himno de oro y plata, que relata las hazañas de Belgrano en las batallas de Salta y Tucumán, así como su acción en la gesta de la independencia americana. En el centro lleva una leyenda escrita por las damas potosinas que cita: "Las potosinas constantes Que fieles se han mantenido En defender el partido De vuestras armas triunfantes Viendo cuan interesantes Son tus triunfos y victorias Desean que a nuevas glorias ¡Oh Belgrano! Te prevengas Por la Patria y te mantengas De su amor, estas memorias"
PINTURA: "Villa Imperial de Potosi, 1813, Damas Potosinas obsequiando la tarja a Belgrano"
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28 DE JULIO DE 1813      Manuel Belgrano envió un oficio al Gobierno desde Potosí, dándole noticias de los últimos acontecimientos de Tacna. Por los informes que había recibido tenía conocimiento de que el Brigadier Joaquín de la Pezuela había desembarcado el 4 de julio anterior con 300 hombres en el puerto de Quilca (Perú), marchando rumbo a Arequipa, y desde este destino a Oruro. Estas novedades incitaron su celo patriota, a la par que aumentaba la instrucción de los reclutas, nombró Coronel al Teniente Coronel Cornelio Zelaya, ordenándole organizar una fuerza para la defensa de Cochabamba y reconociéndolo como Jefe Divisionario. Los efectivos se remontarían a mil de caballería y quinientos de infantería.

07  DE  AGOSTO  DE  1813     Manuel Belgrano se hallaba en Ancacato, 23 leguas al norte de Potosí, con una fuerza de 4.000 hombres y 18 piezas de artillería. Contaba con el apoyo de la población indígena, lo que acababa de asegurarse tras una entrevista con el cacique Cumbia. El plan de Belgrano consistía en atacar al ejército realista por el frente, con el grueso de su ejército; y por el flanco izquierdo con un cuerpo de caballería, organizado en Cochabamba por el coronel Zelaya; mientras el caudillo Baltasar Cárdenas promovía una vasta insurrección de las indiadas a su retaguardia. 


05 DE SEPTIEMBRE DE 1813     Belgrano sale de Potosí (lugar al cual había arribado en junio tras el triunfo de Salta) en busca del ejército realista.

 27  DE  SEPTIEMBRE  DE  1813     Manuel Belgrano acampa con el ejército de su mando en Vilcapugio, Oruro, Alto Perú.

 DE  OCTUBRE  DE  1813     Después de la batalla de Salta la reorganización del ejército, la reparación del material y la incorporación de nuevos reclutas para cubrir las bajas producidas demoraron a Belgrano en Salta casi dos meses. Concluidos los preparativos, avanzó hasta Jujuy, en dirección a Potosí, que fue ocupada en los primeros días de mayo. Al entrar a la Ciudad las calles estaban adornadas con arcos triunfales y una muchedumbre aclamó a los soldados del ejército patriota. Potosí fue una de las ciudades del Alto Perú menos accesible al espíritu de la Revolución. Era un centro minero de gran importancia y asiento de un Banco de Rescates o Casa de Moneda, prevalecía en ella una aristocracia de terratenientes, explotadores del mineral de plata, y de funcionarios reales, veedores, ensayadores y demás categorías del rubro bancario y minero, ligada a los intereses metropolitanos. Con la llegada del ejército patriota se había producido un cambio de opinión, debido a múltiples causas: difusión de las ideas separatistas que eran apoyadas por esa aristocracia, el odio que inspiraban los chapetones, impotencia probable de España para recobrar su imperio colonial, política de capitulación y también debido al temor que inspiraban los soldados del Ejército patriota. Belgrano se esforzó en borrar la pésima impresión que había causado el Ejército patriota cuando había entrado en el Alto Perú al mando de Castelli en 1810, por los excesos cometidos en esa oportunidad. Para ello controló con mano firme la disciplina militar. Un bando militar que se publicó en el ejército disponía en uno de sus artículos: "Se respetarán los usos, costumbres y aun preocupaciones de los pueblos; el que se burlares de ellos, con acciones, palabras y aun con gestos será pasado por las armas”. Antes de llegar el General Belgrano el bando y sus efectos le precedían. Se preocupó también de remontar sus efectivos; y por ello le ordenó al coronel Zelaya que fuera a Cochabamba, con orden de formar allí un nuevo regimiento de caballería.

 DE OCTUBRE DE 1813     Se libra la Batalla de Vilcapugio, en la Segunda expedición auxiliadora al Alto Perú, en la que las tropas rioplatenses, al mando del Gral. Manuel Belgrano fueron derrotadas por las tropas realistas comandadas por el General Joaquín de la Pezuela, "Soldados: ¿con que al fin hemos perdido después de haber peleado tanto? La victoria nos ha engañado para pasar a otras manos, pero en las nuestras aún flamea la bandera de la Patria” A pesar de que se puede pensar que una fatalidad ―la caída de los papeles privados de Cárdenas en manos de Castro― trastocó el plan argentino, no es menos cierto que Belgrano confió demasiado en la supuesta falta de movilidad de su oponente. La ubicación de su campamento tan cerca del de los realistas con demasiada anticipación al resto de sus aliados resultó un error gravísimo, ya que les dio a los españoles la oportunidad de realizar el ataque por sorpresa. Más aún, sabiendo que tres días más le hubieran asegurado rodear el campamento español con la totalidad de sus fuerzas. El resultado de la batalla fueron más de 1500 bajas, más de 400 fusiles perdidos y casi todo el parque de artillería.

5  DE  OCTUBRE  DE  1813     M. Belgrano establece su Cuartel General en Macha, Potosí, Alto Perú.

18  DE ENERO DE 1814     El gobierno acepta la renuncia de Manuel Belgrano, como Jefe del Ejército del Norte, debiendo entregar el mando a San Martín, y quedar al frente del Regimiento Nº 1 "Patricios".

26  DE  ENERO  DE  1814     El Gral. Manuel Belgrano, desde Ticucho (Tucumán), escribía a San Martínignorante todavía de que éste había sido designado Jefe del Ejército Auxiliar del Perú en su reemplazo, variando así la decisión inicial del Gobierno de nombrarlo su segundo; y le adelantaba las noticias de las medidas que estaba tomando con toda urgencia para la reorganización del ejército. Le informaba que había ordenado reunirse a su plana mayor a Paillardelle para que se hiciera cargo del Comando de Artillería. Vilcapugio y Tacna fueron contrastes previsibles dentro de los azares de la guerra, pero casi inevitables, cuando el curso de los acontecimientos estaban indicando una nueva realidad para Iberoamérica. 
  
18  DE  MARZO  DE 1814     Desde la posta de Vinará, Santiago del Estero, Manuel Belgrano se dirige al Gobierno pidiendo su baja para atender su quebrantada salud, a la vez que la gracia de elegir un lugar en Córdoba o Tucumán donde poder hacerlo.

18 DE MARZO DE 1814     El Director Supremo, Gervasio Antonio de Posadas, ordena al Auditor de Guerra que prosiguiera la causa contra Manuel Belgrano hasta ponerla en estado de sentencia. Tras las derrotas de Vilcapugio y Ayohuma, el Gobierno lo releva del Ejército del Norte (paso el mando a San Martín en Yatasto), y lo somete a proceso por ambas derrotas.

12  DE  JUNIO  DE  1814     Manuel Belgrano permanece unos días arrestado en la Villa de Luján, después de su separación del Ejército del Norte.


21  DE  AGOSTO  DE  1814     El General Manuel Belgrano se hallaba retirado en el pueblo de San Isidro. El Cabildo de Buenos Aires le remitió con oficio un par de riquísimas pistolas de arzón “con los emblemas e inscripciones que realzan su mérito” en justo reconocimiento, le decía, del triunfo de Salta; pidiéndole que las aceptase “como una fineza de un padre para con un hijo a quien ama tiernamente”. Lo anterior evidencia el reconocimiento del Cabildo a los méritos de Belgrano, a poco que había sido sobreseído del proceso que se le había seguido, en virtud de sus derrotas en Vilcapugio y Ayohuma. El premio encuentra al otrora victorioso General alejado temporariamente de la escena política, restableciendo su salud en la quinta de Pedriel, propiedad familiar. El alto valor de estas reliquias era (y sigue siéndolo en la actualidad) histórico y simbólico, pero también económico puesto que fueron confeccionadas por los mejores armeros de Inglaterra y con la mejor calidad de la época. En el Acuerdo del Extinguido Cabildo de Buenos Aires del 25 de noviembre de 1814 se registra la cuenta del costo de las pistolas encargadas a Londres para obsequiar al Gral. Belgrano por ser “Vencedor en Tucumán y Salta”, ascendiendo a 637 pesos, 7 reales (abonada por el Ayuntamiento en pagos sucesivos). En las empuñaduras aparece grabado el escudo de la Asamblea del año 1813 y la inscripción Provincias Unidas del Río de la Plata.

14  DE SEPTIEMBRE DE 1814     El Director Supremo Posadas se dirige al Consejo de Estado proponiendo a Belgrano y Rivadavia para la misión diplomática que se enviará a Europa.
                                  
5  DE ENERO DE 1815     Belgrano y Rivadavia dan cuenta al gobierno de la entrevista con el encargado de negocios de España en Río de Janeiro, don Andrés Villalba.

15 DE NOVIEMBRE DE 1815     Finalizada su misión en Europa, Manuel Belgrano se embarca rumbo a Buenos Aires

12  DE  MARZO  DE  1816     Manuel Belgrano es nombrado Jefe del Ejército de Observación de Mar y Tierra.

10 DE ABRIL DE 1816     Se separa del mando del ejército al General Manuel Belgrano. En su reemplazo asumió el General Díaz Vélez. En el acuerdo, firmado en la capilla de Santo Tomé por el representante de Buenos Aires, el general Eustaquio Díaz Vélez, y el de Santa Fe, Cosme Maciel, se acordó que se retiraran las tropas de Buenos Aires del territorio de Santa Fe y se depusiera el Director Supremo del Estado.

11 DE JUNIO DE  1816     Manuel Belgrano recibe el aviso de Pueyrredón en el que le pide que se haga cargo del Ejército del Norte.

6  DE  JULIO  DE   1816     Manuel Belgrano es citado para una reunión secreta del Congreso de Tucumán. Expone ante los Diputados del Congreso Constituyente, traza un panorama de la situación política de Europa, y sugiere la instauración de una monarquía constitucional, encabezada por un príncipe incaico. Adhirieron a esta idea, San Martín, Güemes y los diputados altoperuanos -que propusieron un reino con capital en Cuzco, lo cual aseguraría la adhesión de los indígenas a la causa revolucionaria-.

  9 DE JULIO DE 1816     Se declara en Tucumán la Independencia de las Provincias Unidas del Río de la Plata de España. El día 19 se agrega a la forma utilizada: “y de toda otra dominación extranjera”. El 21 de julio fue jurada la Independencia en la sala de sesiones por los miembros del Congreso, ante la presencia del Gobernador, del General Manuel Belgrano, del clero secular, de las órdenes religiosas y demás corporaciones. La proclama se publicó en catellano,  y también en quechua y aymará con el fin de incorporar al proceso a los pueblos originarios.

15  DE   JULIO  DE  1816     El Congreso de Tucumán dispone que Belgrano tome posesión del Ejército del Norte.

25  DE   JULIO DE 1816     El Congreso de Tucumán, sanciona la ley por la cual ... " Elevadas las Provincias Unidas en Sud América al rango de una Nación (...) será su peculiar distintivo la bandera celeste y blanca que se ha usado hasta el presente y se usará en lo sucesivo exclusivamente en los ejércitos, buques y fortalezas, en clase de bandera menor ... " siendo de tres fajas horizontales. 

7 DE AGOSTO DE 1816     Manuel Belgrano asume la Jefatura del Ejército del Norte en Trancas (Tucumán), en reemplazo de José Casimiro Rondeau, recientemente derrotado en Sipe Sipe.
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14  DE  SEPTIEMBRE  DE  1816     Muere Manuel Ascencio Padilla, en la batalla de La Laguna (Alto Perú) mientras estaba bajo el mando de Belgrano. Manuel Ascencio Padilla era el hijo de un hacendado local, y vivió en el campo casi toda su juventud. Se enroló en el Ejército siendo muy joven. Estudió Derecho en la Universidad Mayor, Real y Pontificia de San Francisco Xavier de Chuquisaca, pero abandonó sus estudios para casarse con Juana Azurduy en 1805. En 1809, Padilla, en su calidad de alcalde pedáneo de San Miguel de Matamoros (o Mata Moros), se opuso a la remisión de víveres para el auxilio de las tropas que venían a sofocar el movimiento juntista que había estallado el 25 de mayo de ese año en la Ciudad de Chuquisaca. Tras ser ésta derrotada, huyó a ocultarse en las aldeas de indios de la sierra. En septiembre de 1810 la Ciudad de Cochabamba se plegó a la Revolución de Mayo y reconoció a la Primera Junta de Buenos Aires. Padilla fue nombrado Comandante Civil y Militar de una amplia zona intermedia entre Chuquisaca, Cochabamba y Santa Cruz de la Sierra, con centro en La Laguna. Desde allí apoyó con sus 2000 guerrilleros indios la campaña de Esteban Arce, que logró la victoria de Aroma. Alojó en sus haciendas al Ejército del Norte y apoyó la política de sus jefes, especialmente del doctor Juan José Castelli. Después de la derrota que las fuerzas rioplatenses sufrieron en la batalla de Huaqui, sus bienes fueron incautados y su esposa cayó presa. Padilla logró rescatarla, por lo que ella pasó con sus hijos al campamento móvil de su esposo. El General vencedor, José Manuel de Goyeneche, ofreció a Padilla un empleo público y el indulto para que se pasase a los realistas, pero éste se negó. Si bien logró una victoria en el pueblo de Pintatora, luego fue derrotado en Tacobamba. Se retiró hacia el sur y se unió al Éxodo Jujeño, a órdenes de Belgrano. Participó en las batallas de Tucumán y Salta, que fueron decisivas para la expulsión definitiva de los realistas de las Provincias que actualmente integran el norte de Argentina. Padilla se reencontró con su esposa y su familia cuando los ejércitos patriotas, bajo el mando de Belgrano, entraron en Potosí el 17 de mayo de 1813. A mediados de ese año logró reunir un enorme contingente de casi diez mil hombres. Este grupo de indígenas rebeldes fue llamado la Republiqueta de La Laguna. Sin embargo Belgrano los utilizó como guías y como transporte de cañones a través de las montañas. Aún después de su primera derrota sólo aceptó la colaboración marginal del batallón de “Leales” bajo el mando de Juana Azurduy, en la batalla de Ayohuma, en que las tropas rioplatenses fueron derrotadas por los realistas. Reconociendo su error, posteriormente el General la condecoró regalándole su espada. Mientras el Ejército se retiraba los Padilla comenzaban una eficaz guerra de guerrillas contra los realistas en la zona de Mojotoro, Yamparáez, Tarabuco, Tomina y La Laguna. Esta última villa se llama actualmente "Padilla" y un pueblo vecino, "Azurduy". Otros jefes, como Ignacio Warnes, Juan Antonio Álvarez de Arenales y Vicente Camargo, organizaron también guerrillas de resistencia. Tras varias semanas de lucha, los realistas secuestraron a los cuatro hijos de los Padilla y mataron a los dos varones. A continuación usaron a las niñas como señuelo para atrapar al caudillo. La respuesta de Padilla y su esposa, seguidos por algunos soldados fue atacar furiosa y ciegamente a sus enemigos, consiguiendo matarlos y rescatar a las niñas, pese a que éstas murieron días más tarde. A partir de ese momento se convirtió en uno de los caudillos más violentos del Alto Perú, lo que lo llevó incluso a enfrentamientos con caudillos como Umaña. Cuando en abril de 1815 el tercer ejército rioplatense al mando de José Rondeau-, se acercaba a las provincias altas, el brigadier Miguel Tacón y Rosique abandonó la persecución de Padilla y se dirigió contra Rondeau. Padilla, que seguía los movimientos del enemigo, aprovechó la ocasión para ocupar Chuquisaca. La guerra continuó sin cuartel, pero los patriotas iban siendo vencidos uno a uno. Tras una serie de batallas menores, rodeadas por un enorme número de enemigos, las fuerzas de Padilla fueron vencidas en la batalla de La Laguna. El vencedor, coronel Aguilera, ordenó matar a los prisioneros, entre ellos Padilla. Su cabeza fue expuesta en la punta de una lanza en la plaza de La Laguna. Belgrano lo nombró coronel, sin saber que ya había muerto. Al enterarse, nombró teniente coronel a Juana Azurduy, que intentaba seguir sin su marido. Pero también Juana debió retirarse hacia el sur, refugiándose en la ciudad de Salta.

 15  DE  SEPTIEMBRE  DE  1816     Batalla de Colpayo. El 15 de septiembre de 1816, siendo Belgrano Jefe del Ejército del Norte y gobernador de Salta Martín Miguel de Güemes, los capitanes Agustín Rivera y Diego Cala con el ayudante Falagiani y el teniente Justo Gonzales y 42 soldados, en una noche de luna, se batieron en los campos de Colpayo (cercano a la actual ciudad jujeña de Abra Pampa) contra el teniente coronel Pedro Zabala que tenía a sus órdenes dos capitanes, 125 soldados, un secretario y doce mujeres. El resultado fue netamente favorable para las tropas de Rivera y Diego Cala. Tras el triunfo, los locales que solo habían perdido la vida de un solo hombre, se apoderaron de las pertenencias de su enemigo, como 35 fusiles, 12 bayonetas, 4 pistolas, 2 sables, 20 cartucheras, 450 cartuchos a bala, 35 piedras de chispa, 12 lanzas, 2 cajas de guerra, tres tiendas de campaña, 40 mulas y 5 caballos. En el ataque sorpresa logran matar a Zabala, quien no habiendo querido rendirse murió a manos del valeroso Rivera, el capitán Andrade y 15 soldados, tomando prisioneros al capitán Fructuoso Zenteno, un paisano y 12 soldados. En la transmisión de la noticia de la gran victoria se meritan las acciones de Diego Cala, -que también se destacara en la batalla de Puesto del Marquéz- José de la Cruz Obando, de los cabos del regimiento José Santillán y Dámaso Miranda. Enterado el gobernador Güemes, le comunica a Belgrano quien a su vez informó al Director Supremo Juan Martín de Pueyrredón, quien le respondió: "Enterado y dénseles las gracias por conducto del General a nombre del Gobierno y que proponga el Capitán General el premio a que juzgue, se han hecho acreedores los oficiales y jefes que concurrieron a tan gloriosa acción". Seguidamente la victoria de Colpayo fue celebrada en Buenos Aires el 24 de septiembre de 1816.

 26  DE  FEBRERO  DE  1817    Belgrano responde a San Martín felicitándolo por su triunfo en "Chacabuco"   "Tucumán. Excelentísimo Señor Don José de San Martín, Capitán General y el Jefe del Ejército de los Andes. Los Pueblos y Ejército de mi mando, llenos de júbilo y contento, ven en vuestra excelencia el Libertador de Chile, y le dan las gracias por el beneficio que deben a sus nobles esfuerzos, felicitándolo conmigo, igualmente que a sus compañeros de armas, que han sabido seguir las huellas que vuestra excelencia les trazó para cubrirse de glorias las armas de la Nación, sacar de la opresión a nuestros hermanos, y afianzar para siempre la independencia de la América del Sud. Dios guarde a vuestra excelencia muchos años. Manuel Belgrano"

 28  DE  MAYO  DE  1817     El gobierno accede a la solicitud de Manuel Belgrano respecto al nombramiento de coronel mayor y condecoración a otorgarse a Martín Miguel de Güemes por los servicios prestados.

27 DE JUNIO DE 1819     Desde Cruz Alta, Córdoba, al mando del ejército que debe operar en Santa Fé, Manuel Belgrano informa al Directorio del estado calamitoso en que se encuentran sus tropas.

28 DE JUNIO DE 1819     Manuel Belgrano, alejándose del teatro de la guerra civil, establece su campamento en Pilar, en las márgenes del río Segundo, a 45 kilómetros de Córdoba.

 10  DE  SEPTIEMBRE  DE  1819     Última proclama de Belgrano a su ejército: "Me es sensible separarme de vuestra compañía, porque estoy persuadido de que la muerte me sería menos dolorosa, auxiliado de vosotros, recibiendo los últimos adioses de la amistad"Pero es preciso vencer a los males, y volver a vencer con vosotros a los enemigos de la Patria que por todas partes nos amenazan. Voy, pues, a reconocer el camino que habéis de llevar para que os sean menos penosas vuestras fatigas, en nuevas marchas que tenéis que hacer. Nada me queda que deciros, sino que sigáis conservando el justo renombre que merecéis por vuestras virtudes, cierto de que con ellas daréis glorias a la Nación, y correspondéis al amor que os profesa tiernamente vuestro general."

11  DE  SEPTIEMBRE  DE  1819     Manuel Belgrano deja el mando del Ejército del Norte definitivamente a su segundo, el general Francisco Fernández de la Cruz.

1  DE  OCTUBRE  DE  1819     Manuel Belgrano gravemente enfermo, en viaje a Tucumán, llega a Santiago del Estero.

20  DE  OCTUBRE  DE  1819     El Gobierno comunica a Manuel Belgrano que ha dictado un decreto que lo autoriza a pedir - a nombre y cuenta del Estado - todo lo que pueda necesitar para el importantísimo objeto de atender su salud.

  DE  ABRIL  DE  1820     Procedente de Tucumán, llega M. Belgrano gravemente enfermo, a su casa de Buenos  Aires.

19  DE  JUNIO DE 1820     Manuel Belgrano pide a su hermana Juana que le alcanzase su reloj de oro que tenia colgado en la cabecera de la cama y, dirigiéndose  a su médico Joseph  James Thomas Redhead, le dijo: "Es todo cuanto tengo que dar a este hombre bueno y generoso" (recordemos que el reloj fue robado del Museo Histórico Nacional el 2 de julio de 2007).  En 1819 el Coronel Mayor Don Martín Güemes, Gobernador autónomo de Salta, Comandante de la Milicias Gauchas, y Jefe de la Vanguardia del Ejército del Norte, había enviado a Joseph Redhead a Tucumán para atender la quebrantada salud del Creador de la Bandera.

20 DE JUNIO DE 1820     A las 7 de la mañana, muere el Doctor Manuel Belgrano en la casa donde había nacido. Sus últimas palabras fueron: ¡Ay Patria mía! ... Belgrano murió en la pobreza total, atacado por una agobiante enfermedad, en una Buenos Aires asolada por la guerra civil, que llegó a tener ese día tres gobernadores distintos. “Pienso en la eternidad, adonde voy, y en la tierra querida que dejo…”, comentó antes de morir. Sólo algunos parientes y dos o tres amigos acompañaron sus restos. El Despertador Teofilantrópico fue el único periódico que se ocupó de la muerte de Belgrano. Para los demás no fue noticia. La autopsia de su cuerpo fue hecha por su fiel amigo y médico de cabecera, el doctor Joseph James Thomas Redhead, que lo embalsamó cuidadosamente, diciendo al tiempo de practicar esta operación que había encontrado su corazón más grande que el común de los mortales, lo que siendo materialmente  cierto, era el efecto natural de su enfermedad, originada por los dolores que lo afligieron.

28  DE  JUNIO  DE 1820     La historia nos recuerda que el velatorio y la inhumación de sus restos fueron actos que se desarrollaron casi sin pena ni gloria. Pocas personas asistieron al sepelio. Manuel Belgrano es sepultado en el atrio de la Iglesia de Santo Domingo, amortajado con hábito de patriarca de la Orden, según su última voluntad. Sobre su tumba se colocó una losa de mármol que era de un mueble familiar, encerrada en un marco de madera al nivel del suelo, con este epitafio: "Aquí yace el General Dn. Manuel Belgrano".

11  DE   JULIO  DE  1828     La Gaceta Mercantil publica un aviso con el título: “Una venta interesante”, y el dibujo de un edificio, para informar: “La casa quedada por muerte de D. Domingo Belgrano Peri y la señora María Josefa González, sita en la calle apellido del primero y es comprendida en los números (no dice la numeración) en su actual estado: los señores que quisieran comprarla enteramente libre, ya sea de toda pensión o dejando ya en las mismas diez mil pesos de capellanías legas, existentes y por fundar, podrán dirigir sus propuestas a D. Francisco Belgrano, teniente coronel de los ejércitos de la Patria donde hoy habita en la calle de Tacuarí Nº 39 en la inteligencia que se admitirán en pago fondos públicos del 4 y 6 por ciento y acciones del banco para ser todo su importe retenido y existente en ambos establecimientos hasta que se finiquite la división y partición general de las testamentarias de los dichos finados sancionada y ejecutada desde el año de 1802. Procediendo el que suscribe para esta venta por las calidades de que está revestido desde el citado año que precede y consta de los respectivos autos fehacientes cuaderno 5 de albacea de su finada señora madre que lo fue también del finado señor su padre, depositario judicial, pagador de sus bienes, derechos y futuras sucesiones. Buenos Aires, Julio 5 de 1828”.

·        Datos tomados de la publicación “web” del Instituto Belgraniano de Rosario